Tras 23 años, vecinos del barrio Padre Mugica recibieron sus escrituras

Un total de 33 familias del barrio Padre Mugica de Banda Norte vivieron un día histórico al recibir, después de más de dos décadas de espera, las escrituras de sus viviendas. El acto se llevó a cabo en el marco del Plan Provincial de Regularización Dominial, con la participación del intendente Guillermo de Rivas, el exintendente Juan Manuel Llamosas y autoridades provinciales.

Un sueño cumplido después de más de 20 años

Las viviendas habían sido entregadas hace 23 años, pero sus adjudicatarios no contaban con la documentación que los acreditara como dueños legales. La entrega de escrituras se concretó gracias al trabajo conjunto del Gobierno de Córdoba, la Municipalidad de Río Cuarto y el Colegio de Escribanos, que realizó el trámite de manera gratuita como parte de una tarea social.

“Es un acto muy emocionante para todos nosotros. Después de tantos años, los vecinos hoy se sienten verdaderos propietarios, con todo lo que eso significa”, destacó el intendente Guillermo de Rivas durante la ceremonia.

Por su parte, Juan Manuel Llamosas subrayó que este tipo de iniciativas son una política pública sostenida en el tiempo: “Regularizar la situación dominial es una muestra de un Estado presente, que trabaja para garantizar derechos y mejorar la calidad de vida”.

Las voces de los vecinos

Entre la emoción y las lágrimas, los propios beneficiarios compartieron su alegría. Una vecina expresó: “Hace 23 años que estábamos esperando. El hecho de tener el título de la casa es muy importante. Ahora es distinto: podemos decir que es nuestra”.

Otra mujer agradeció la oportunidad de acceder finalmente a la escritura: “Mi esposo vivió más de 20 años en esta casa, y ahora por fin tenemos los papeles. Gracias a Dios, llegó el momento”.

Más barrios se sumarán al plan

Desde el municipio confirmaron que la entrega de escrituras continuará en los próximos meses en otros barrios de la ciudad, en el marco del mismo programa provincial. El objetivo es avanzar en la regularización de miles de familias que aún esperan el reconocimiento formal de la propiedad de sus hogares.

De esta manera, el barrio Padre Mugica se transforma en un símbolo del esfuerzo colectivo y la perseverancia de los vecinos, quienes tras más de dos décadas hoy pueden decir que son dueños plenos de sus viviendas.