“Una manera de andar”: la travesía de Matías, Lucía y su perra por el mundo

Matías y Lucía decidieron hace más de seis años dar un giro profundo en sus vidas. Cansados de la rutina laboral en una multinacional y atravesados por una crisis económica que los dejó sin trabajo, resolvieron reinventarse y dedicarse al marketing digital. Con esa base profesional comenzaron a viajar por el mundo, generando ingresos en movimiento y sin necesidad de depender de los tradicionales días de vacaciones.

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A esta aventura se sumó desde el primer momento Almond, una cocker de ocho años que se convirtió en la tercera integrante de la familia viajera. Aunque en un principio era una perra muy casera, poco a poco se acostumbró a la ruta. Hoy se sube al auto, se acomoda en el asiento y duerme hasta llegar a destino.

En palabras de Lucía, los viajes también transformaron la personalidad de su mascota: “antes era más antisocial y ahora se acerca a todos moviendo la cola”.

El proyecto, bautizado “Una manera de andar”, comenzó formalmente en 2019. Ese año viajaron a México, donde trabajaron bajo la modalidad de house sitting: cuidaban casas y mascotas mientras sus dueños se ausentaban, lo que les permitía tener alojamiento y un espacio para cumplir con sus tareas profesionales.

Más tarde la ruta los llevó a Colombia y, tras la pandemia, decidieron sumar recorridos extensos por la Argentina. Con un motorhome llegaron hasta Ushuaia por la Ruta 3 y regresaron por la Ruta 40, exploraron el Norte argentino y más recientemente recorrieron provincias de Cuyo como San Juan y La Rioja.

Su base de operaciones se encuentra en Merlo, San Luis, a la que definen como su “lugar en el mundo”. Allí descansan entre viaje y viaje, pero siempre con la mirada puesta en el próximo destino.

Para ellos, viajar lento es la clave: permanecer semanas o meses en cada lugar les permite profundizar la experiencia, conocer las culturas locales, probar nuevas comidas y compartir con comunidades que de otro modo no habrían conocido.

El motor del proyecto es también la interacción con quienes siguen sus relatos en redes sociales. A través de Instagram y YouTube, Matías y Lucía documentan cada paso, generan comunidad y responden los mensajes de sus seguidores.

“Nos gusta que la gente pueda recorrer Argentina a través de nuestros ojos, incluso quienes no pueden viajar”, cuentan.

Hoy planean nuevos rumbos, con cambios en el vehículo que los transporta y viajes que se proyectan para lo que queda de 2025 y el 2026. No revelan demasiado porque, dicen, prefieren mantener la expectativa. Lo que sí sostienen es que no hay arrepentimiento alguno. “Esto ya es un estilo de vida. Salimos, volvemos, hacemos vida de hogar y otra vez partimos con la ilusión de un nuevo viaje”, resumió Matías.

“Una manera de andar” no pretende ser una fórmula universal, sino una inspiración. “Cada uno tiene su propia manera de andar”, afirma Lucía. En su caso, la decisión de vivir viajando se transformó en una filosofía que combina libertad, trabajo remoto, comunidad y la ternura incondicional de su perra, que los acompaña en cada tramo del camino.