Una estafa pintada: hicieron un pago trucho, la policía los engañó y terminaron presos

Un grupo de estafadores intentó concretar una compra con una tarjeta trucha en una reconocida pintureria céntrica. Creyeron haber engañado a los comerciantes, pero al regresar por un supuesto olvido, la policía los estaba esperando.

---

Una historia digna de guion policial se vivió en una pinturería de pleno centro. Allí, un grupo de personas intentó concretar una compra cuantiosa utilizando una tarjeta de crédito falsa, sin fondos y con datos adulterados.

En primera instancia, la maniobra pareció salirles bien: cargaron la mercadería y abandonaron el lugar. Sin embargo, el hecho dio un giro inesperado. Mediante una engaño, fueron contactados y convencidos de regresar al local por un supuesto olvido. Nunca imaginaron que la policía ya los esperaba.

El operativo desplegado fue de magnitud: participaron al menos diez móviles y un importante número de efectivos. La sospecha de que se trataba de una banda organizada dedicada a este tipo de estafas obligó a montar un procedimiento especial.

Cuando los delincuentes pusieron un pie nuevamente en la pinturería, quedaron acorralados. Los agentes los detuvieron en el acto, sin margen de escape.

El caso encierra una paradoja: los estafadores que habían engañado con un pago trucho terminaron siendo ellos mismos engañados por la policía.

Una historia que deja un mensaje claro para los comerciantes: extremar precauciones ante maniobras cada vez más sofisticadas de fraude.