Un proyecto que cambia recorridos, pagos y frecuencias: Cómo será el nuevo transporte urbano

El Ejecutivo municipal envió al Concejo Deliberante un proyecto que promete recorridos más directos, eliminación total de trasbordos y herramientas digitales para mejorar la experiencia del usuario. La propuesta fue elaborada junto a la UTN, la SAT y AOITA, y prevé una reforma operativa con impacto económico y territorial.

El Gobierno de Río Cuarto formalizó el envío al Concejo Deliberante del proyecto para rediseñar por completo el sistema de transporte urbano de pasajeros. La iniciativa, construida junto a especialistas de la UTN y actores del sector, propone eliminar los trasbordos obligatorios, mejorar frecuencias y extender recorridos para alcanzar zonas hoy poco cubiertas.

Durante la presentación, el secretario de Prevención y Convivencia Ciudadana, Gastón Maldonado, afirmó que el plan recoge las demandas ciudadanas:

“Entendemos que estamos haciendo un aporte sobre varios de los puntos que la gente misma ha marcado en las consultas y diagnósticos”.

El funcionario pidió una “discusión madura” en el Concejo y destacó el trabajo conjunto entre Municipio, UTN, SAT y AOITA.

Por parte del equipo técnico, el Ing. Juan Jaurena —docente, investigador y referente en movilidad— explicó que el nuevo esquema se basa en recorridos más largos y directos para evitar trasbordos, uno de los reclamos históricos de los usuarios. Aseguró además que se mantendrá la cantidad de unidades y choferes, lo que despeja dudas sobre posibles recortes laborales en el sector.

Desde la empresa concesionaria, el presidente de la SAT Río Cuarto, Rodrigo Reineri, respaldó los cambios y anticipó una fuerte transformación operativa:

“Se agregarán más coches y se llegará a nuevos puntos de la ciudad. Creemos que va a mejorar el transporte y que va a ser fructífero para nuestros usuarios”. Reineri confió en que, con el rediseño, podría aumentar la cantidad de pasajeros.

Una discusión con mirada federal

El debate sobre el transporte local no puede escindirse del contexto nacional: subsidios concentrados en el AMBA, tarifas desiguales entre provincias y un sistema que durante años golpeó a ciudades intermedias como Río Cuarto, obligadas a financiar gran parte del servicio con recursos propios. La propuesta municipal aparece como un intento por adaptar el modelo a la realidad local sin depender de decisiones centralizadas que históricamente han perjudicado a las provincias.

Además, el proyecto incorpora herramientas digitales —integración con Google Maps y nuevos medios de pago— que buscan achicar la brecha tecnológica entre grandes áreas metropolitanas y ciudades del interior, donde estas innovaciones suelen llegar más tarde.

Qué viene ahora

El expediente pasará ahora a estudio legislativo, donde oficialismo y oposición deberán evaluar el impacto económico, la reorganización de recorridos y la viabilidad operativa. Si el Concejo lo aprueba, Río Cuarto podría iniciar en 2025 una reconfiguración profunda de su sistema de transporte, mientras el país discute cómo financiar los servicios fuera del AMBA y cómo sostenerlos sin dejar a pie a las economías regionales.