Un informe confidencial de 2007 ya pedía investigar a Bárzola y fue ignorado
- Telediario Digital
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Un documento elaborado por un ex agente del FBI y redactado por Mariana Azar Walker recomendó profundizar la investigación sobre Roberto Bárzola apenas meses después del crimen. El informe estuvo disponible desde abril de 2007, pero nunca fue incorporado a la causa y hoy vuelve a cobrar relevancia con el avance judicial.
Un informe confidencial elaborado en 2007 por un ex agente del FBI ya señalaba a Roberto Bárzola como una línea clave de investigación en el crimen de Nora Dalmasso.
El documento fue redactado por Mariana Azar Walker, a pedido de los abogados de la familia Macarrón, y presentado ante la Justicia una vez finalizado, aunque nunca llegó a incorporarse formalmente al expediente.
Según detalló Azar Walker, el informe se basó en el análisis completo de las actuaciones judiciales existentes hasta ese momento, sin realizar medidas de investigación propias. A partir de ese trabajo, los investigadores descartaron distintas hipótesis que habían ganado peso en la causa y advirtieron contradicciones relevantes en los testimonios, en especial en las declaraciones de Bárzola y de su jefe.

Uno de los puntos centrales del informe fue la reconstrucción del escenario del crimen. Allí se destacó que no hubo signos de ingreso forzado a la vivienda, que algunos elementos del interior presentaban alteraciones llamativas y que el propio Bárzola se ubicó en la escena en un rango horario compatible con las estimaciones de los peritos forenses sobre la muerte de Nora Dalmasso.
El documento concluyó que existían elementos suficientes para profundizar la investigación sobre Bárzola por oportunidad, motivo y capacidad para cometer el crimen, y recomendó avanzar en esa línea. Incluso, los autores del informe mantuvieron reuniones previas con el entonces fiscal Di Santo antes de iniciar el análisis del caso.
Pese a haber sido entregado en mano en la Fiscalía General en 2007, el informe nunca fue incorporado al expediente.
A casi dos décadas del crimen, ese trabajo vuelve a cobrar relevancia en el marco del actual avance judicial, que retoma una hipótesis que había sido planteada desde los primeros meses de la investigación y luego quedó relegada.

