“Todas mis maternidades”: la historia real detrás de una búsqueda que duró 10 años
- Telediario Digital
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La comunicadora y escritora riocuartense presenta este martes 11 de noviembre, a las 19, en Isla, su libro “Todas mis maternidades”, una obra escrita “a corazón abierto” donde narra una búsqueda de más de 10 años, tratamientos, duelos, adopción frustrada y el camino a la subrogación de vientre. Invita a madres, padres y familias a compartir sus propias historias.
La historia que Luciana Altobelo contará hoy en la presentación de “Todas mis maternidades” no es lineal ni perfecta. Es, como ella misma la define, “un recorrido honesto y real por todas las maternidades, las visibles y las invisibles”.
El encuentro será este martes 11 de noviembre, a las 19, en Isla, con lectura de fragmentos, música y participación de personas que se cruzaron con su historia y la animaron a publicarla.
En la entrevista, Altobelo recordó que el libro nace de “una necesidad profunda de compartir” lo que vivió: una búsqueda de más de una década, tratamientos de fertilidad invasivos, pérdidas gestacionales, intentos de adopción y, finalmente, la decisión de recurrir a la subrogación de vientre.
“Quería que quien está pasando por esto encuentre una voz amiga, alguien que ya caminó ese dolor silencioso”, explicó.
Contó que muchas mujeres y también varones se le acercan para decirle: “yo también perdí”, “a mí también me costó”, “gracias por escribirlo”.
La autora subraya que el deseo de maternar la atravesó por completo: trabajaba, tenía una carrera, pero lo que más quería era ser mamá. Y cuando el embarazo no llegó de manera natural, apareció la culpa, la estadística y el miedo a “no lograrlo nunca”.
En el libro narra ese pasaje del deseo a la frustración, del positivo a la pérdida, del duelo a volver a intentarlo, y también el momento en que su cuerpo dijo basta y junto a su pareja eligieron la subrogación como un modo posible y amoroso de llegar a sus hijos.
Uno de los ejes más potentes de “Todas mis maternidades” es que no romantiza lo que vino después. Altobelo cuenta que la llegada de Salvador y luego de Olivia fue tan esperada como desafiante: el puerperio, el cansancio, el miedo a que algo les pasara, la terapia para poder soltar y el aprendizaje de que “haberlo deseado 10 años no significa que todo sea color de rosa”.
Esa sinceridad, dice, es la que hizo que muchas personas quisieran contarle sus propias historias, incluso hombres que perdieron embarazos con sus parejas.
La presentación de hoy, anticipó, no será un monólogo sino un “compartir”: habrá lecturas de otras personas, música y lugar para niños, porque la idea es celebrar la vida en todas sus formas.
“Cuando los sueños se sueñan juntos, se multiplican”, escribe en la frase final del libro. Y ésa es la invitación.