En Concordia, Pablo Laurta se negó a declarar por el crimen del remisero

El ciudadano uruguayo, detenido por el asesinato del remisero Martín Palacio, guardó silencio ante la fiscalía entrerriana. Será trasladado a Córdoba, donde enfrentará la acusación por el doble femicidio de su ex pareja y su ex suegra.

Pablo Laurta, de 39 años, se negó este miércoles a declarar ante la fiscal Daniela Montangie en Concordia. El acusado del crimen del remisero Martín Palacio escuchó la imputación en su contra y, consultado por la magistrada, respondió con un escueto “no” cuando se le preguntó si deseaba dar su versión de los hechos.

Así concluyó la audiencia de imputación formal contra Laurta, quien quedó acusado de homicidio criminis causa, un delito que prevé como única pena la prisión perpetua. Según el Código Penal, esta figura se configura cuando alguien mata a otra persona para ocultar, facilitar u obtener impunidad en otro delito.

Traslado a Córdoba

Laurta permaneció algunas horas en la Jefatura Departamental de Concordia, donde fue sometido a una revisión médica y luego trasladado a una celda de la Comisaría del Menor y la Familia. Allí permanece aislado, bajo estricta vigilancia, hasta que se concrete su traslado a Córdoba.

En Córdoba será indagado por el doble femicidio de su ex pareja, Luna Giardina, de 24 años, y su ex suegra, Mariel Zamudio, de 50. La fiscalía de Córdoba ya prepara la acusación por estos crímenes, que conmocionaron a la región.

Este jueves está prevista la audiencia en la que la fiscal Montangie solicitará una medida de coerción ante la jueza de Garantías Gabriela Seró. Cumplido ese trámite, se iniciará el procedimiento para su envío a la Justicia cordobesa.

La búsqueda de restos humanos

Mientras tanto, la Policía de Concordia continúa con un intenso rastrillaje en la zona de Yeruá, en campos y arroyos, con el apoyo de caballos y drones. El operativo apunta a encontrar las extremidades y la cabeza que faltan en el cuerpo hallado el lunes pasado, que podría corresponder al remisero Palacio, la última víctima de Laurta en Entre Ríos.

Hasta el momento, las tareas no arrojaron resultados positivos y el operativo se mantiene abierto.