Aguinaldo, gastos y vacaciones: las tres decisiones que pueden salvar tu verano

El asesor financiero Laureano Gitto sostiene que el aguinaldo no alcanza para todo y que la clave no es “hacer magia”, sino anticiparse, ordenar prioridades y no hipotecar el 2026 por dos semanas de descanso. Cómo planificar regalos, vacaciones y evitar estafas en tiempos de sueldos “magros”.

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Con el aguinaldo en la mira, las fiestas a la vuelta de la esquina y las vacaciones cada vez más cerca, muchas familias sienten que el verano se juega en la tarjeta. En una entrevista televisiva, el consultor y educador financiero Laureano Gitto advirtió que no se trata de “estirar la plata a cualquier precio”, sino de tomar tres decisiones clave: anticiparse, definir prioridades y no prender fuego el futuro financiero por dos semanas de vacaciones.

Gitto recordó algo básico pero poco practicado: todos los años hay Navidad, cierre de actividades y vacaciones. Sin embargo, la mayoría llega a diciembre sin haber separado nada durante el año. Puso como ejemplo el pago de la matrícula escolar, que hoy implica un gasto fuerte de contado, y valoró a quienes usan el aguinaldo para adelantarse a ese compromiso del 2026.

“El concepto es ese: anticiparse. Si durante el año guardás un poco, a fin de año por lo menos tenés una parte de los regalos y las vacaciones resueltos”, remarcó.

El asesor fue tajante con una idea muy repetida en redes: “invertí el aguinaldo, no lo gastes”.

Según explicó, en la realidad económica actual, para la mayoría esa frase es casi una burla. “Es imposible pensar en inversión si todo el año no previste nada. La clave no está en el aguinaldo mágico, sino en ir separando un porcentaje que no te mueva la aguja del corto plazo. Si no, el ahorro no es sostenible”, señaló, cuestionando una cultura muy cortoplacista, donde se privilegia el consumo inmediato y recién en diciembre aparece el estrés.

A la hora de decidir qué hacer con el aguinaldo, Gitto insistió en ordenar prioridades: qué es innegociable (como la educación de los hijos) y qué puede ajustarse.

Ni el extremo de “me ahorro todo y no vivo”, ni el “lo gasto todo y después veo”. En esa línea, defendió el uso inteligente de las cuotas sin interés, una herramienta muy argentina que no existe en muchos países, pero advirtió contra la trampa de financiar viajes que superan el presupuesto real.

“Si el viaje sale de tu bolsillo igual, no podés elegir un destino solo porque ‘Brasil está barato’ si eso te deja pagando una bola de deuda todo el año”, resumió.

El consultor también analizó la fiebre por los destinos vecinos: Brasil y Chile aparecen como “más baratos” para muchos argentinos que las sierras o la costa local. Pero Gitto pidió mirar el cuadro completo: distancia, combustible, impuestos por salir del país y el monto total del viaje. Y fue claro: conviene si se trata de compras grandes y planificadas; si es para “un par de zapatillas y tres remeras”, puede salir más caro que aprovechar financiación y descuentos en el mercado interno.

Finalmente, dejó una advertencia sobre estafas e inversiones milagrosas, que se multiplican a la par de eventos como el Black Friday. Recomendó no entregar datos personales por teléfono o WhatsApp, verificar siempre que las plataformas estén reguladas por la Comisión Nacional de Valores y desconfiar de rendimientos imposibles, muy por encima de un plazo fijo.

“No existe el atajo para hacerse millonario en un año. Invertir es paciencia, hábito y constancia”, insistió. Y dejó una frase que condensa el espíritu de la charla: “No prendas el futuro financiero de todo el año por dos semanas de vacaciones”.