Petroquímica Río Tercero: Hubo acuerdo con el sindicato y la planta volverá a producir
- Telediario Digital
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Tras 166 días de conflicto, la empresa y el gremio firmaron un entendimiento que destraba la crisis, garantiza salarios y permite la reincorporación de trabajadores. Solo resta la homologación oficial.

Luego de más de cinco meses de tensión, negociaciones y riesgo concreto de cierre, Petroquímica Río Tercero alcanzó un acuerdo con el Sindicato del Personal de Industrias Químicas y Petroquímicas que permitirá reactivar la producción y poner fin a uno de los conflictos industriales más prolongados del año en el interior de Córdoba.
El entendimiento fue rubricado este viernes en la delegación Río Tercero de la Secretaría de Trabajo de la Provincia y, según informó el medio local Diario Río Tercero, solo resta la homologación de la cartera laboral para que entre plenamente en vigencia.
El conflicto se había iniciado el 14 de julio, cuando la empresa paralizó sus plantas y desvinculó a 124 trabajadores, entre operarios y personal jerárquico. La situación se agravó semanas atrás, cuando la presidenta y principal accionista de la firma, Verónica Vara, advirtió públicamente sobre la posibilidad de un cierre definitivo, encendiendo alarmas en toda la región.

Desde el gremio destacaron que el acuerdo no implica rebaja salarial ni flexibilización laboral, dos de los puntos más resistidos durante la negociación. “Lo más importante es haber logrado mantener el convenio colectivo de trabajo, uno de los aspectos que la empresa quería eliminar”, sostuvo el secretario general del Spiqyp, Lucas Felici.
El dirigente remarcó además que los trabajadores conservarán sus salarios y que el acuerdo incluye un “convenio de crisis” con un plazo máximo de cinco años, sujeto a revisión si la situación económica de la empresa mejora. En ese marco, por el término de un año los empleados no realizarán el aporte jubilatorio del 14% y la empresa tampoco hará contribuciones patronales, con el objetivo de destinar esos fondos a la recuperación productiva.
Otro punto central del entendimiento es la reincorporación de 16 trabajadores despedidos, sobre un reclamo inicial de 24. Con las plantas paralizadas desde hace más de cinco meses, la empresa deberá ahora encarar tareas de mantenimiento y puesta a punto antes de retomar la producción.
El acuerdo trae alivio a Río Tercero y a toda la región, donde la industria química es un motor clave del empleo, y vuelve a poner sobre la mesa el debate de fondo: cómo sostener la actividad industrial en el interior del país en un contexto de crisis, ajuste y falta de políticas productivas de largo plazo.

