La “super gripe” H3N2 avanza en silencio: por qué preocupa a los especialistas y qué recomiendan
- Telediario Digital
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La expansión de la gripe H3N2 volvió a encender las alarmas sanitarias a nivel global. Europa atraviesa una temporada con niveles “muy elevados” de actividad gripal y Argentina confirmó los primeros casos, en un contexto marcado por reuniones sociales, baja inmunidad previa y escasa vacunación en algunos países.

Desde Italia, el corresponsal Marcelo D’Aloisio explicó que la actual temporada está dominada por la cepa H3N2, responsable de cerca del 90% de los casos confirmados en el continente. Según datos difundidos por la Organización Mundial de la Salud, más de la mitad de los países europeos registran circulación intensa del virus, con especial impacto en Reino Unido y en naciones del este europeo.
Italia y España también reportaron aumentos sostenidos de contagios durante diciembre. En el caso británico, especialistas vinculan la presión sobre el sistema de salud con los bajos niveles de vacunación, una diferencia clave respecto de otros países del sur europeo donde la cobertura es mayor.

La preocupación se agrava por la cercanía de las fiestas de fin de año, con encuentros en espacios cerrados y mayor exposición de los grupos de riesgo: niños, adultos mayores de 65 años y personas con sistemas inmunológicos debilitados. Aunque las autoridades aclaran que no se trata de una situación comparable al Covid-19, recomiendan reforzar cuidados básicos aprendidos durante la pandemia.
En Argentina, la confirmación de casos obliga a mirar el escenario con atención federal. La circulación viral en el hemisferio norte suele anticipar lo que puede ocurrir meses después en el sur, lo que plantea desafíos para las provincias en materia de prevención, campañas de vacunación y capacidad hospitalaria, especialmente fuera de los grandes centros urbanos.

El escenario abre un debate sanitario y político: cómo garantizar vacunas, reforzar sistemas de salud provinciales y evitar que la falta de prevención vuelva a golpear con más fuerza a las regiones con menos recursos. Las próximas semanas serán clave para medir la respuesta y el impacto real del brote.

