Gobernadores dialoguistas avanzan en un interbloque propio y agitan el mapa político
- Telediario Digital
- hace 9 horas
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Los mandatarios de Salta, Tucumán, Catamarca y Neuquén se reunieron en la Casa de Salta para afinar la creación de un interbloque que podría alterar los equilibrios parlamentarios a partir del recambio legislativo. Buscan mayor volumen político, autonomía y capacidad de negociación frente a la Casa Rosada y al peronismo.
Los gobernadores Gustavo Sáenz (Salta), Osvaldo Jaldo (Tucumán), Raúl Jalil (Catamarca) y Rolando Figueroa (Neuquén) se reunieron en la Casa de Salta con un objetivo claro: avanzar en la conformación de un interbloque propio de legisladores dialoguistas.
La jugada se da en la antesala del recambio parlamentario y apunta a ganar peso político en un Congreso fragmentado.
Según trascendió, los mandatarios coincidieron en la necesidad de contar con una estructura parlamentaria que refleje el peso territorial de sus provincias y que les permita negociar en mejores condiciones tanto con el oficialismo nacional como con la oposición. En paralelo, se busca evitar quedar diluidos entre los bloques mayoritarios, especialmente ante la reconfiguración post electoral.
El armado, sin embargo, no está exento de diferencias internas. Aunque existe consenso sobre la necesidad de construir un espacio federal, aún no hay definición completa sobre la ingeniería legislativa, la cantidad de miembros finales ni la coordinación del bloque. La resistencia de algunos sectores peronistas suma tensión, en un contexto donde cada banca se vuelve determinante.
Desde una mirada federal, la iniciativa refleja una demanda recurrente del interior: romper la dependencia política de Buenos Aires y fortalecer la autonomía de las provincias en debates clave como coparticipación, obras públicas, tarifas, transporte y economías regionales.
La creación de un interbloque podría convertirse en una herramienta de presión para evitar que decisiones nacionales continúen concentrándose en el AMBA.
El movimiento de los gobernadores promete impacto en el Congreso. Un bloque de peso medio, articulado y con identidad propia, puede transformarse en bisagra en votaciones sensibles y obligar a la Casa Rosada a renegociar apoyos.
