“Es el peor mes para el biodiésel en la gestión Milei”
- Telediario Digital

- 20 sept
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Las 25 pymes productoras de biodiésel del país detuvieron su actividad y encendieron una alarma por el riesgo de desabastecimiento de combustible en los próximos días. La decisión responde al atraso de precios regulados por la Secretaría de Energía, que —según denuncian— se mantiene desde hace 15 meses en perjuicio del sector y en beneficio de las petroleras.
En diálogo con este medio, Marcelo Kusznierz, referente de la Cámara de Biodiesel, advirtió:
“Hace 15 meses que la Secretaría de Energía no cumple la resolución 963/23, que obliga a actualizar los valores según los costos reales de producción. El precio fijado está muy por debajo de la fórmula polinómica, lo que significa transferir recursos a las petroleras y quitarle al sector del biodiésel ingresos por más de 80 millones de dólares. Esto hace insostenible mantener la estructura de las plantas”.
El dirigente subrayó que la parálisis golpea de lleno a las provincias productoras, ya que el ecosistema del biodiésel moviliza empleo directo e indirecto.“El sector genera 4.000 puestos de trabajo directos y casi tres veces más en forma indirecta. Detrás de cada planta hay laboratorios, servicios de mantenimiento, metalmecánica, soldadura, movimiento de suelo. Es un agregado de valor fundamental a la cadena sojera y a las economías regionales”, señaló Kusznierz.

El reclamo llegó al Congreso esta semana, donde representantes de la Cámara expusieron ante la Comisión de Agricultura del Senado. Allí insistieron en la necesidad de una nueva Ley de Biocombustibles, tomando como base el proyecto de la Liga Bioenergética impulsado por legisladores de provincias productoras como Córdoba.
“La Argentina debe mirar a Brasil, que ya tiene más de 90 plantas de biodiésel y una Ley de Combustibles del Futuro consensuada. Aquí nos estamos quedando con apenas 25 plantas, cuando ya cerraron dos. Lo único que hoy le ganamos a Brasil es en fútbol”, ironizó Kusznierz.
La paralización de las pymes no solo amenaza al empleo y a las provincias, sino también a la política energética y ambiental.“Cuando cargues gasoil en el surtidor vas a tener un corte mínimo de biodiésel, lo que significa más contaminación y mayor dependencia del combustible fósil importado. En épocas de falta de dólares, apostar contra una industria nacional que sustituye importaciones y paga en pesos es un error estratégico enorme”, sentenció.




