Caruso en TD : habló de “arreglos” y encendió la final entre Estudiantes y Madryn

En una entrevista con Telediario, el entrenador volvió a apuntar contra la dirigencia del fútbol argentino y denunció presiones arbitrales y favores políticos. En la previa de la gran final, su discurso agitó el clima en Río Cuarto y reavivó sospechas sobre el manejo del ascenso.

La antesala de la final entre Estudiantes de Río Cuarto y Deportivo Madryn ya tenía condimentos propios de una definición histórica. Pero Ricardo Caruso Lombardi le sumó pólvora pura: denuncias de presiones, arbitrajes direccionados y un sistema “podrido” que, según él, condiciona cada ascenso en el fútbol argentino.

En diálogo con Telediario, Caruso aseguró que el partido previo de Deportivo Madryn estuvo “marcado” por incidentes que —según su mirada— debieron derivar en sanciones inmediatas.

“Lo lógico sería que hayan suspendido a cuatro o cinco jugadores. Hubo peleas, hubo policía involucrada… y sin embargo nadie informa nada”, lanzó.

El DT también apuntó directamente a los vínculos políticos y dirigenciales que, según él, generan un clima sospechoso en torno a Madryn.

“Siempre quieren sacar ventaja. Ya saben quiénes manejan la historia. Llegan a la AFA, tienen llegada al uno y al dos”, dijo, en alusión a los máximos cargos institucionales. Y aseguró que los árbitros “son condicionados”: “Al que no hace lo que le dicen, el lunes ya está afuera”.

Un mensaje que golpea a las economías regionales del fútbol

Para Caruso, este entramado afecta de manera directa a los clubes del interior. Reclamó que las instituciones de provincias quedan en desventaja frente a estructuras políticas metropolitanas.

“A los dirigentes del fútbol argentino no les importa la gente del interior. Les importa que paguen la entrada y la cuota”, disparó, en una crítica que vuelve a exponer la desigualdad histórica entre clubes grandes y equipos que sostienen sus economías con recursos locales.

En Río Cuarto, donde el fútbol mueve comercios, transporte, hotelería y empleo eventual cada vez que Estudiantes disputa instancias definitorias, sus palabras impactaron de lleno. La ciudad vive un sueño deportivo, pero también teme que decisiones externas condicionen un ascenso que significaría millones para el ecosistema deportivo de la región.

Caruso y un escenario más que tenso

El DT advirtió que el primer partido en Río Cuarto podría tener un arbitraje “que no permita sacar mucha diferencia”, y que la revancha en Madryn sería un terreno “hostil”. Al mismo tiempo reclamó que los dirigentes del interior “dejen de callarse” y denunció que quien se atreve a enfrentar al poder “queda fuera del sistema”.

El mensaje final fue lapidario: “Si la gente no da un vuelco total a este fútbol podrido, seguirá todo igual”. En la ciudad, en plena cuenta regresiva a la final, el ruido ya se instaló.

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