El titular de la cátedra de Enfermedades tóxicas y transmisibles de los porcinos, de la Facultad de Agronomía y Veterinaria, Arnaldo Ambrogi, sobre la gripe porcina, dijo que hay que estar atentos, reforzar las medidas de protección, sobre todo por parte de quienes trabajan con cerdos, pero no generar un estado de alarma que perjudique al sector porcino.
PRENSA UNRC – El titular de la cátedra de Enfermedades tóxicas y transmisibles de los porcinos, de la Facultad de Agronomía y Veterinaria, Arnaldo Ambrogi, sobre la gripe porcina, dijo que hay que estar atentos, reforzar las medidas de protección, sobre todo por parte de quienes trabajan con cerdos, pero no generar un estado de alarma que perjudique al sector porcino.
Señaló: «La Oficina Internacional de Epizootias es la que reconoce qué países están libres de las distintas enfermedades enfermedades, sobre todo aquellas que tienen más importancia desde el punto de vista de la zoonosis. Argentina ha sido reconocida internacionalmente libre de influenza porcina». Aunque admitió: «Existen trabajos en los que se ha demostrado que en la Argentina hay anticuerpos contra la enfermedad en algunos cerdos, esto podría estar indicando que a lo mejor el virus pueda estar circulando, pero que nunca haya producido ningún caso».
«Argentina no tiene reportado ningún aislamiento del virus de la influenza porcina», remarcó.
Y agregó: «Que los anticuerpos se hayan detectado, podría estar indicando que el virus podría estar circulando y que nunca haya producido ningún brote, ni nada. No necesitamos que haya un cerdo infectado para que aparezca la gripe porcina, alcanza con que entre al país una persona afectada, que traiga el virus. Se puede transmitir de un humano a otro humano».
«Los anticuerpos surgen cuando ha pasado el antígeno -el virus-. Lo cual no implica necesariamente que el individuo se haya enfermado. Pero, genera el anticuerpo, porque estuvo en contacto con ese antígeno. Sin embargo, lo cierto es que nunca se ha diagnosticado el virus en un caso clínico. Los anticuerpos se han detectado a través de kits que se aplican al suero de la sangre», explicó.
Recomendaciones
Este médico veterinario y master en Salud y producción porcina, puntualizó: «La gente que tiene contacto directo con los cerdos debe tomar medidas, como desvestirse, bañarse y colocarse otra ropa para ingresar a las granjas y luego repetir el proceso, al egreso. Pero como eso es difícil, otra cosa que pueden tener en cuenta los productores de cerdos es usar pañuelos de papel y sonarse la nariz antes de entrar al lugar donde están los animales y después volver a hacerlo, usar barbijo, guantes y material descartable que pueda quedar en la granja, para su posterior desecho».
Por otro lado, Ambrogi opinó: «Una opción es la vacuna contra la gripe para humanos, que si bien no previene el virus del cerdo H1 N1, tiene efectos preventivos, con lo cual se podría lograr una protección parcial».
“Se cree que la mitad del genoma es del cerdo y la otra mitad del humano. Eso hace que no haya una protección del cien por ciento, porque hay mucha mutación, el virus cambia”, indicó. Y acotó: «Otra cosa es vacunar a los cerdos con la vacuna que está disponible para esto, que cuesta una dos dólares por dosis».
«Igual, una vez colocadas las vacunas, tanto en los cerdos como en los humanos, hay que esperar unos 20 o 30 días para obtener los beneficios de protección», aclaró.
Seguidamente, el docente investigador indicó: «La posibilidad de que entre el virus está más vincula a las personas que a los animales, porque Argentina no importa cerdos ni de Estados Unidos, ni de México. Con lo que hay que tener mucho cuidado es con Brasil, por ejemplo, que es un país de muy alta concentración de producción porcina. Hay que estar alerta con eso, porque se están trayendo animales desde allá, lo mismo con Paraguay, Bolivia y Chile».
Un virus de vieja data que sorprende con este brote
Arnaldo Ambrogi señaló: «Es un virus muy viejo. Tiene diagnósticos en humanos desde 1965, pero ahora deben haber variables que están influyendo para que haya una mayor proliferación de los virus y las bacterias. Algo tiene que estar ocurriendo para que se den estos brotes violentos».
Al describir la producción porcina, el docente afirmó: «En la actualidad, la Argentina faena 3.200.000 cerdos por año. Se estima que hay unas 240 mil madres. La provincia de Buenos Aires es la que más tiene, le siguen Santa Fe y Córdoba. En nuestra provincia debe haber aproximadamente unas 60 mil madres, de las cuales unas 12 mil son del Departamento Río Cuarto».
Sobre los perjuicios de este mal para la producción y la comercialización de cerdos, señaló: «Hay que tener mucho cuidado, pero no alarmar para no perjudicar a este sector, porque la verdad es que no hay ningún indicio de que estemos ante un brote de la gripe porcina. Se puede provocar una baja innecesaria en el consumo».