Se dio a conocer la derogación de la ordenanza que prohíbe la carga de combustibles a motociclistas sin casco.
La decisión generó satisfacción entre los trabajadores de estaciones de servicio porque reclamaban por malos tratos de los motociclistas sin casco que no podían cargar nafta.
Marcelo Espindola, del Sindicato de Playeros de Estaciones de Servicio, destacó la importancia de esta determinación ya que «los trabajadores recibian a diario todo tipo de insultos, agresiones e incluso han recibido golpes de puño».
Además agregó que «la normativa sin casco, no hay nafta, nunca sirvió».