El temporal fue descrito por la intendenta Noemí Fauda como «un tornado» que en sólo minutos se desencadenó en esa población distante unos 90 kilómetros al este provincial, sobre ruta nacional 19.
Evacuados, voladuras de techos, caída de árboles y de postes el tendido eléctrico fue el resultado del fuerte temporal de agua, viento y piedra que azotó el martes la localidad cordobesa de Tránsito.
Según informó el diario La Voz del Interior, durante algunas horas, los vecinos sufrieron la interrupción del suministro eléctrico. Y las clases se suspendieron debido a la situación de riesgo.
El temporal fue descrito por la intendenta Noemí Fauda como «un tornado» que en sólo minutos se desencadenó en esa población distante unos 90 kilómetros al este provincial, sobre ruta nacional 19.
Según los registros, cayeron unos 100 milímetros en pocos minutos. Hubo casas afectadas y el techo de la iglesia quedó destruido. Ya en marzo pasado, Tránsito había sufrido graves inundaciones.
“Enseguida, entre los bomberos y los vecinos se despejó la ruta. Había mucha agua, por las ramas se taparon los desagües. Los bomberos evacuaron a 5 personas nada más, porque la gente no quiere salir de sus viviendas. Tuvimos mucho derrumbe de vivienda, techos, rajaduras de techo, tinglados”, dijo la jefa comunal.
“Todo parecía que iba a explotar, el ruido, muchísimas piedras, piedras muy grandes. Habrán sido unos 20 minutos”, agregó en declaraciones a Mitre Córdoba.
El vendaval se desató alrededor de las 16. “Tuvimos varios problemas. Corte de luz, porque se cayeron varios palos de luz. Después todo era desolador porque había plantas, todas caídas, de muchísimos años, teníamos corte de la ruta en varios puntos”, relató Fauda.
Fauda explicó que aún no tiene «la dimensión completa del daño”. “Una iglesia centenaria está dañada. Hay que reconstruir todo. Anoche llegó el ministro Manuel Calvo. Hoy dijo que iban a llegar la mercadería de siempre, colchones, ropa, mercadería, eso va a ser depositado en Cáritas y veremos cómo se distribuye. Vinieron bomberos de otras localidades”, mencionó al precisar el operativo de ayuda a los damnificados.
“Gracias a Dios no hay víctimas, no hay golpeados. Y parece que va a seguir lloviendo. Hoy es muy fea la situación en el pueblo. Muy desolador lo que se está viviendo”, describió Fauda.