Lo dijo Beatriz Aguirre, esposa de José Neyra, el cadete de 52 años que fue colisonado por un automóvil Chevrolet Aveo en la intersección de Roma y Gaudard el pasado lunes.
«Mi marido está luchando cada día por su vida» Lo dijo en diálogo con Telediario Beatriz Aguirre, esposa de José Neyra, el cadete que fue colisionado por un automóvil Chevrolet Aveo en la intersección de Roma y Gaudard el pasado lunes. El motociclista resultó gravemente herido y permanece internado en el Instituto Médico.
Neyra recibió el impacto del automóvil al mando de Graciela De la Barrera, de 61 años. El herido impactó contra una columna tras ser colisionado y la moto fue arrastrada varios metros.
El cadete fue asistido por vecinos y personal policial hasta que arribó el servicio de emergencias y se resolvió su traslado hacia el Nuevo Hospital.
«Hemos pasado momentos crìticos. Mi marido está luchando día a día y tiene cuatro hijos que lo esperan. No tengo rencor contra la mujer que lo chocó, que Dios la perdone. Pero, al menos debería haberlo auxiliado. En ningún momento se acercó», dijo Beatriz.
Añadió que «una mujer que fue testigo afirmó que la conductora venía hablando por celular y a alta velocidad».
«Mi marido jamás se saca el casco, no circula a más de 30 ó 40. Es muy prudente. Hace 10 años que trabaja como cadete», enfatizó.
La mujer precisó que «muchos vecinos y comerciantes con los que trabajaba nos dieron su apoyo y realizan oraciones por él».
«José quedó con costillas y mandíbula quebrada, los dientes se desprendieron y perdió un pulmón. El otro pulmón lo salvaron en el Hospital. Los médicos nos pidieron paciencia porque está luchando por su vida», subrayó.