Lo dijo Rubén Crespo, presidente de Alianza, tras el papelón por un nuevo cambio de horario en el histórico partido del domingo entre el Tricolor e Independiente. Sostuvo además que el conjunto moldense «vivirá un desafío del que se va a hablar toda la vida».
«Es una verguenza de la organización» Lo dijo en diálogo con Telediario Rubén Crespo, presidente de Alianza, tras el papelón por un nuevo cambio de horario en el histórico partido del domingo entre el Tricolor e Independiente por la Copa Argentina.
En principio se iba a jugar a las 20, luego se habló de las 19 y finalmente, en la tarde del jueves, los dirigentes se sorprendieron al ser notificados que el horario de inicio se trasladaba a las 21.
«Hoy -por el jueves- se vendieron 1.500 entradas y habrá mucha gente de la región que volverá durante la madrugada. Puede haber un accidente y nadie se hace responsable. Por una hora de televisión arriesgamos muchas vidas en la ruta. Es una verguenza y alguien debe intervenir. Esto debe cambiar. La decisión debe haber surgido de algún dirigente que no conoce la realidad del interior», argumentó.
Crespo admitió que el partido ante Independiente «es soñado». «Antes, cuando íbamos a jugar con Estudiantes, Atenas ó Banda Norte nos preparábamos un mes. Ahora llego esto. Con solo estar sentados en la cancha y ver a los chicos allì estaremos hechos», admitió.
El dirigente recordó el momento del sorteo que se efectuó en Ezeiza en el que estuvieron presentes. «Cuando el presidente dijo que los grandes iban a jugar con las cenicientas no lo podíamos creer. Nos tocó Independiente y está todo el mundo entusiasmado», enfatizó.
Por su parte, Juan Borghi, tesorero de Alianza, resaltó que «ya se han vendido 1.700 plateas, en Córdoba se vendieron otras 500 de la parcialidad de Alianza y unas 1.500 entradas más se van a vender aquí y en la región».
«Lo mismo pasa con las camisetas. Hicimos 200 para el partido con Independiente y se vendieron en un día. La firma que las hace no da a basto», admitió.