La despedida definitiva docurrirá seis días antes de que monseñor Uriona tome posesión en Río Cuarto. En su llegada a la ciudad cordobesa, el prelado estará acompañado por una nutrida delegación de añatuyenses.
La comunidad añatuyense despedirá a monseñor Adolfo Uriona, obispo electo de Villa de la Concepción del Río Cuarto, el próximo sábado 13 de diciembre, con la celebración de una santa misa de acción de gracias por su ministerio pastoral de una década en la diócesis y una fiesta para expresarle los mejores deseos en la nueva misión que emprenderá en el sur de Córdoba.
Monseñor Uriona inició la visita de distintos lugares de la diócesis «para celebrar confirmaciones y llevar un saludo a las comunidades, a la espera de un nuevo obispo diocesano». En calidad de administrador pontificio de la diócesis, el obispo visitó hace días Quimilí y celebró allí las confirmaciones.
La despedida definitiva de los añatuyenses ocurrirá seis días antes de que monseñor Uriona tome posesión de la sede episcopal de Río Cuarto. En su llegada a la ciudad cordobesa, el prelado estará acompañado por una nutrida delegación de añatuyenses.
El nuevo obispo de Villa de la Concepción del Río Cuarto asumirá su nueva misión pastoral el 19 de diciembre, con una ceremonia en la catedral riocuartense, seguida de una procesión y misa en la iglesia San Francisco Solano