En el convenio, el municipio exige la prestación de asistencia financiera y en el artículo 10, uno de los más polémicos, define que el aporte llega al 10 por ciento del presupuesto oficial del Estado local.
El bloque oficialista aprobaría hoy el convenio con el Banco Ciudad que impulsa el Ejecutivo.
La iniciativa tendrá el rechazo de toda la oposición, que cuestiona fuertemente el vínculo entre Jure y el macrismo.
En el acuerdo, el municipio plantea un convenio por «transferencia y depósito de coparticipación municipal, acreditación de depósitos, servicio de pago de haberes, servicio de Fondo Unificado, recaudación de tasas y servicios municipales, servicio de Cuentas Corrientes, centro de Atención al cliente (Municipalidad), instalación de cajeros automáticos y la actuación como asesor financiero por parte de la entidad.
Además, exige la prestación de asistencia financiera y en el artículo 10, uno de los más polémicos, define que el aporte llega al 10 por ciento del presupuesto oficial del Estado local.
Además, acordaron un sobregiro, es decir un descubierto, por la mitad de la masa salarial, unos $ 11 millones mensuales.
También se prevé la creación línea de descuentos de certificados a proveedores.
Críticas
El bloque de Unión por Córdoba impulsó en la Unicameral un proyecto para cuestionar el acuerdo del municipio con el Banco Ciudad, que hizo caer un histórico convenio con el Banco de Córdoba.
“Consideramos que esta decisión es una acción de oportunismo político, sin sustento técnico, y sin evaluar las consecuencias negativas que la misma traerá aparejada, tal como la pérdida de beneficios para el personal municipal, incertidumbre para el personal bancario, ni los efectos indirectos sobre el comercio local”, señalaron.
Añadieron que “los empleados municipales perderán, sin dudas, los beneficios que hoy le otorgan los servicios financieros del Banco de Córdoba, que otorgan ventajosas tasas de interés, fácil y rápido acceso al crédito personal, amplios plazos de financiación para compras en planes pargos, entre otros.”
Texto completo:
LA LEGISLATURA DE LA PROVINCIA DE CORDOBA DECLARA
Su preocupación por el proyecto de Ordenanza enviado por el Intendente de la Ciudad de Río Cuarto Juan Jure al Honorable Concejo Deliberante, que tiene por objeto desplazar al Banco de la Provincia de Córdoba como prestador de los servicios operativos y agente financiero de la Municipalidad de Río Cuarto y sustituirlo por el Banco de la Ciudad de Buenos Aires, por las consecuencias negativas y los perjuicios que ello le traerá aparejado al personal bancario involucrado, al personal municipal y a la actividad comercial local, por la pérdida de beneficios en las ventajosas tasas de interés, el fácil y rápido acceso al crédito personal, el plazo de financiación para compras en planes largos y tantos otros.-
A la vez que se dirige a los miembros del Honorable Concejo Deliberante de la Ciudad de Río Cuarto a fin de instarlos a:
• reflexionar sobre la trascendencia del cambio propuesto,
• defender el banco de todos los cordobeses y los logros tangibles obtenidos por esta entidad que -día a día- los devuelve en beneficios para toda la comunidad,
• debatir y analizar en profundidad un tema que compromete al Municipio por una década,
• deponer los intereses políticos partidarios en post del futuro de la Ciudad de Río Cuarto, y
• rechazar –en definitiva- el proyecto de ordenanza en cuestión.-
Fundamentos
El intendente de la Ciudad de Río Cuarto, Juan Jure, envió al Concejo Deliberante de esa ciudad un proyecto de Ordenanza, que tiene por objeto reemplazar al Banco de Córdoba como prestador de servicios operativos y agente financiera de la Municipalidad de Río Cuarto, y sustituirlo por el Banco de la Ciudad de Buenos Aires.
Consideramos que esta decisión es una acción de oportunismo político, sin sustento técnico, y sin evaluar las consecuencias negativas que la misma traerá aparejada, tal como la pérdida de beneficios para el personal municipal, incertidumbre para el personal bancario, ni los efectos indirectos sobre el comercio local.
Una medida de esta naturaleza, ubica a las aspiraciones políticas del intendente de Río Cuarto, en su intención aliancista con el partido que gobierna la ciudad de Buenos Aires, por encima del bienestar de los ciudadanos de Río Cuarto en general, y de los empleados municipales y bancarios en particular.
Los empleados municipales perderán, sin dudas, los beneficios que hoy le otorgan los servicios financieros del Banco de Córdoba, que otorgan ventajosas tasas de interés, fácil y rápido acceso al crédito personal, amplios plazos de financiación para compras en planes pargos, entre otros.
El ejecutivo municipal no ha dado explicaciones concluyentes acerca de las ventajas que pueda significar la contratación del nuevo banco, y más bien son muchos los interrogantes que surgen a cualquier vecino, acerca de qué manera se prestarán los servicios contratados.
Los interrogantes que aún no tienen respuesta son, por citar algunos, la manera en que el Banco Ciudad equiparará la infraestructura del Banco de Córdoba, que hoy cuenta con 4 sucursales, 3 centros de atención, 21 cajeros automáticos, 11 puestos de autoservicios, y 87 empleados; en cuánto tiempo estará disponible el nuevo servicio, tanto desde el punto de vista operativo como legal, con las debidas autorizaciones del Banco Central; por qué en el convenio que se pretende ratificar por el mencionado proyecto de Ordenanza, nada se menciona sobre que el financiamiento ofrecido por el Banco Ciudad depende de autorizaciones de Banco Central de la República Argentina y del Ministerio de Economía de la Nación.
El perjuicio para el comercio de la ciudad de Río Cuarto también merece ser considerado con gran preocupación por la pérdida de una oferta de créditos personales que ofrece el Banco de Córdoba en general y en particular a quienes cuenta con una cuenta sueldo, que sin dudas impactará en el nivel de ventas del comercio local.
Además de estas consideraciones fácticas, existe un aspecto conceptual de fondo que está en juego en esta situación. El Banco de Córdoba, que fue recibido por la gestión de Unión por Córdoba, en una situación crítica con problemas de rentabilidad, de liquidez y de solvencia, es hoy en día un banco saneado financieramente, que tiene una importante penetración comercial en el mercado de los servicios financieros con sus distintos productos, y que trabaja permanentemente por el desarrollo de la comunidad a la que pertenece como lo demuestran las últimas propuestas llevadas adelante para estimular el consumo.
Por todo esto, es que expresamos nuestra preocupación por la situación mencionada, y solicitamos a los miembros del Honorable Concejo Deliberante de la Ciudad de Río Cuarto que reflexionen sobre la trascendencia del cambio propuesto, defiendan el banco de todos los cordobeses y los tangibles logros obtenidos por esa entidad y que devuelve dia a dia en beneficios para la comunidad, y que debatan en profundidad un tema que va a comprometer por una década al Municipio de Río Cuarto, y en definitiva que rechacen el proyecto de ordenanza en cuestión.