Nicolás Franzutti, vocero de los ambulantes que resistieron la erradicación, dijo que es «discriminatorio el trato». Una carpa de una empresa de automotores ocupa el espacio público desde el martes.
Nicolás Franzutti, vocero de los vendedores ambulantes que resistieron la erradicación de las calles, dijo que es «discriminatorio el trato» del municipio por la instalación de una carpa de una empresa de automotores en Plaza Roca.
El uso público del espacio verde y la radicación temporal de promociones comerciales vuelve a plantear el debate.
Desde el municipio se había insistido en prohibir la radicación de la venta ambulante en el sector y hubo fuertes críticas por una feria navideña que propuso desde la venta de toallones, hasta el expendio de choripanes.
Sin embargo, una firma de venta de automóviles dispuso desde el martes de una impactante carpa en la que se promocionaban vehículos estacionados sobre la vereda, incluso obstaculizando el ingreso por las rampas para discapacitados.
Con música a alto volúmen, dispusieron del lugar durante toda la jornada. Días atrás, realizó lo mismo una mutual que pertenece a los trabajadores universitarios.
Vendedores callejeros plantearon su malestar por lo que consideran «beneficios exclusivos para los que disponen de recursos económicos».
«No entendemos la postura de la Municipalidad. Ellos dicen que está prohibida la venta ambulante con puestos fijos, semifijos y desmontables. ¿Y esto que es?», resaltó Franzutti.
Añadió que «las grandes empresas pueden instalarse en la Plaza como quieren y los vendedores que queremos ganarnos el pan no podemos»