«La educación emerge como el principal elemento de transformación», dijo Avila. Más de 20 alfabetizados siguieron la escuela formal.
Víctor Suárez aprendió a leer y escribir a los 52 años y su máximo logro fue compartir la lectura de un libro de cuentos con sus 3 hijos. Como él, 570 riocuartenses se sumaron al programa Yo si puedo, un método alfabetizador que desarrolla el área de Educación del municipio.
20 beneficiarios siguieron la escuela formal y hasta sueñan con la universidad, según precisó Gustavo Avila, secretario de Desarrollo Humano.
Víctor recordó que decidió “ir a la escuela” después de la insistencia de Paola, una alfabetizadora barrial.
“No estoy arrepentido. Puedo leer los carteles de las calle y no preguntar más donde estaba parado. Quiero aprender a escribir mejor y seguir estudiando”, expresó.
Agradeció a Paola “porque se arriesgó conmigo, no faltó nunca aunque hiciera frío ó mucho calor”.
“Leo junto con mi hija, puedo saber que dicen los mensajes de texto y hasta me compré un auto y pude saber lo que estaba tratando”, reflexionó emocionado.
Convenio
«Una vez más renovamos el convenio con la fundación cubana Un mundo mejor posible y seguimos avanzando con el programa», expresó Avila.
El funcionario precisó que «las personas que aprenden a leer y escribir descubren un mundo nuevo y el programa mantiene la vitalidad de entender a la educación como el principal elemento de transformación».