Conmovedor recuerdo de un riocuartense desaparecido en la Dictadura

0
Compartir

«Cuántas veces tuve miedo de olvidarte! De no reconocerte! Cuántas veces caminé las calles en busca de tus ojos, descreída de tu ausencia, empeñada en retenerte…»

Escrito Silvina Berti, hermana de Carlos, desaparecido durante la última dictadura militar.

Hoy es el cumple de mi hermano Carlos, hoy cumple, una vez más, 22. Hace 37 años que siempre cumple 22. Podemos acordar en que no tiene sentido pensar en cómo hubiera sido la historia de no haber sido como fue… sin embargo, permítanme, por hoy, hacer en voz alta algunas preguntas que tantas veces han rondado en mi cabeza: ¿cómo hubieras sido, hermano mío? Tenías cabeza de científico, ¿habrías seguido tu fantasía de ser físico nuclear? ¿O un físico teórico (y no puedo dejar de pensarte un poco Sheldon)? Quién te dice, en una de esas podrías haber desarrollado una nueva teoría que hubiese revolucionado al mundo científico (para mejor, siempre para mejor). ¿Qué hubiera sido de tu cuerpo flaco y esbelto con el paso del tiempo? ¿Y de tus profundos ojos claros y de tus dedos largos? ¿Te seguiría gustando tener la lata de leche condensada y atacarla a cucharadas antes de dormir? Sé que no podrías haber seguido viajando en el vagón de carga para acompañar al Huinca (o al Capitán, como te gustaba llamarlo) porque hasta las vías del tren nos fueron arrebatadas. ¿Te acordarías de la cantidad de veces que escuchamos juntos Penélope en el disco simple con el que conocimos a Serrat? ¿Habrías olvidado tu promesa de no ir más al cine conmigo por la vergüenza de mi llanto incontenible? ¿Y cuándo habrías dejado de esconderte detrás de la palmera para asustarme en las noches de invierno? No sabés cuánto extrañé salir a las corridas y sentir tus pasos detrás de mi… Y ni te imaginás cuántas veces esperé tu llegada en medio de la noche para verte aunque más no fuera un segundo, para poder abrazarte una vez más.
Me hubiera gustado tenerte, como al resto de mis hermanos, poder hablar con vos, discutir con vos, pelear con vos, amigarme con vos. Me hubiera gustado que no te hubiesen obligado a transformarte en ese super-yo al que tantas veces recurrí y recurro en busca de respuestas: ¿ Qué hubiera dicho Carlos de …? ¿Qué pensaría si…? Lo último que me dijiste fue que no tenía que dejarme engañar por el oro yanqui, en la única carta en la que incluiste unas líneas, en la última letra en que te tuve cerca. Tu letra de araña, garabato diminuto e inconfundible.
Cuántas veces tuve miedo de olvidarte! De no reconocerte! Cuántas veces caminé las calles en busca de tus ojos, descreída de tu ausencia, empeñada en retenerte, en ese impulso contradictorio y doloroso de querer que estuvieras vivo y desear tu muerte ante la sola idea de la tortura infinita. Pero no te olvidé, cierro los ojos y te veo. Y si no te encontré, mi hermoso hermano Carlos, fue simplemente porque nunca te perdí.
Carlos Guillermo Berti Domínguez
Hijo de Adelo Berti y Lía Domínguez de Berti
Nació en Río Cuarto el 22 de febrero de 1955 y desapareció en alguna calle de Buenos Aires el 11 de abril de 1977.

Commentarios

commentarios

Compartir

Dejar una respuesta