El piloto Ignacio Casale se convirtió hoy en el primer chileno campeón del Rally Dakar, al heredar la corona del argentino Marcos Patronelli en cuatriciclos. El español Marc Coma ganó en motos.
Canale ganó después de completar con un tiempo de 2:11,37 horas el tramo final de 157 kilómetros en su país, entre el balneario de La Serena y Valparaíso.
En la categoría Motos, el español Marc Coma se proclamó campeón por cuarta vez al cabo de la última etapa, que ganó el francés Cyril Despres.
Casale, de 27 años, sacó provecho de la deserción de Marcos en la tercera etapa de esta sexta edición del Dakar en Sudamérica y desde entonces se aferró a un liderazgo que terminó de popularizar su figura entre los fanáticos chilenos de la competencia, junto a la del motociclista Francisco «Chaleco» López.
“No tengo palabras para describir lo que siento. En los últimos 20 o 30 kilómetros venía llorando. Impresionante el apoyo de la gente. Ojalá que todo chile se sienta identificado con este victoria”, aseguró Casale, apenas cruzó la línea de meta.
El chileno, quien se adjudicó siete etapas en el Dakar 2014 y ocho desde que corre el rally, ganó la especial de hoy con un tiempo 2h.11m.37s. y relegó por 54 segundos al holandés Sebastien Husseini (Yamaha) y por 3m.07s. al polaco Rafal Sonik (Yamaha), quien completo el podio del día.
En la general, Casale empleó 68h.28m.04s. para completar las 13 etapas del rally desde que salió de Rosario hasta la meta en Illapel, a unos 231 kilómetros del Valparaíso, donde los competidores tendrán la ceremonia de clausura del Dakar 2014.
El podio definitivo de la presente edición del Dakar terminó con Sonik en el segundo escalón, a 1h.26m.49s. y con Husseini tercero, a 5h.40m.24s., lo que significó que para el piloto trasandino las últimas dos etapas fueron un paseo hasta terminar con el número 1.
El joven piloto había competido antes en el Dakar en otras dos categorías, camiones y motos. Lo hizo primero con su padre en un camión T4 y llegó 26to., en 2010. Al año siguiente, pasó a moto y llegó 40mp. a Buenos Aires, pero decidió seguir probando todas las categorías de la prueba.
Corriendo con Yamaha, igual que Patronelli, el chileno demostró pronto que era un legítimo aspirante a la corona de cuatris, con un cuarto puesto en 2012 y un podio, en el segundo lugar, en 2012.
“En principio, el año que viene me paso a coches. Es el momento, no puedo seguir así”, se apuró a confesar Casale días atrás, cuando todavía faltaban un par de etapas para su consagración en cuatris.
Casale había pronosticado, antes de largar este Dakar Argentina-Bolivia-Chile, lo que terminó pasando hoy: «A este rally habrá que ponerle corazón, pero me imagino que será muy linda la llegada en Valparaíso». Mejor imposible, llegó como campeón.