El Papa Francisco encabezó una ceremonia en la plaza de San Pedro para pedir por la paz en Siria y hacer un examen de conciencia mundial sobre el compromiso para evitar la guerra. Dijo que la «violencia sólo conlleva muerte» y que «la guerra no es el camino para la paz». También pidió trabajar «por la reconciliación y por la paz».
«¿Acaso no queremos un mundo de armonía», se preguntó Francisco. «¿Es posible recorrer el camino de la paz? Sí, es posible para todos», destacó. El papa llegó a pie al exterior de la Basílica de San Pedro acompañado por el cardenal Angelo Comastri, arcipreste de San Pedro y vicario de la Ciudad del Vaticano. En la plaza de San Pedro se encuentraban miles de fieles, en su mayoría romanos y otros italianos llegados de diversos puntos del país a bordo de autobuses.
También había una delegación islámica de la comunidad del Mundo µrabe en Italia, con su presidente Foad Aodi al frente, quien dijo a los periodistas que para ellos el papa Francisco «es un ídolo, serviría un guía así para el mundo islámico».