Lo dijo Marcela Peralta, subsecretaría de Trabajo de la UNRC.
A 5 años de las explosiones en la Planta Piloto de la Universidad, en la que fallecieron 5 docentes y un alumno, la subsecretaria de Trabajo, Marcela Peralta, dijo en diálogo con Telediario que «hubo fuertes negligencias de las autoridades en su momento»
La funcionaria resaltó que «lo más fuerte tras la tragedia fue instalar que las condiciones de trabajo deben ser concientizadas entre todos»
«Somos muy críticos de las leyes de trabajo. Hay muchas cosas que no cierran. Los trabajadores deben ser protagonistas de sus condiciones, porque las conocen mejor que nadie», indicó.
Peralta sostuvo que «hay fuertes regulaciones para llevar a cabo una investigación, pero el grado de inseguridad con el que se trabajaba dejaba mucho que desear»
«No solo los investigadores sabían como se trabajaba, sino que la información había llegado a planos jerárquicos. Las autoridades conocían de lo que se hacía aquí. Además, hay consejos directivos en las facultades que avalan las actividades académicas, todo esta regulado», aseveró.
Para la funcionaria, «es necesario implantar otro paradigma y la visión de que la Universidad debe crear conciencia y el conocimiento debe proteger la vida».
El hecho
Según surge de la resolución de la Cámara, el 5 de diciembre de 2007, alrededor de las 10 horas se produjo un derrame de miscela que provocó que gases provenientes del hexano se desparramaran – presuntamente por efecto de la corriente de aire que ingresara desde el portón “norte”-, hacia el lado sur de la nave central de la Planta Piloto, donde, presuntamente al tomar contacto con una fuente de calor.
Se trataría de un dispositivo autoclave para esterilizaciones, el que atento el estado en que se encontraba luego del siniestro –válvula de gas abierto y con paquetes- puede presumirse que se hallaba encendido.
Esto, produjo una primera deflagración que recorrió en sentido inverso a la dirección que habían tomado los gases, hasta llegar a la parte central de la Planta Piloto produciendo una gran columna de fuego y nuevas explosiones.