Lo dijo Laura Britos, de la ONG Oasis. El hombre que agredió a su pareja y a una mujer policía fue liberado a las pocas horas. «La Justicia debe dar una respuesta por que lo que ocurrió es una aberración», señaló.
Tras la liberación de un hombre de 33 años que había sido denunciado por su esposa, debido a recurrentes golpizas, desde la ONG Oasis calificaron lo sucedido como «aberrante».
El agresor había intentado obligar a su mujer a participar de la venta de dos bicicletas robadas y como la víctima se negó, la golpeó ferozmente.
Luego, cuando un móvil policial llegó a la vivienda en calle Dorrego del 0 al 100, el hombre también golpeó a una mujer policía.
Lo sorprendente es que por la tarde fue liberado y pudo ser filmado por las cámaras de Telediario en el lugar del hecho.
El sujeto fue imputado por lesiones leves y resistencia a la autoridad por el hecho ocurrido ayer, a las 2.30, cuando la Policia recibió la denuncia de una persona de 50 años, quien relató una brutal golpiza por parte de su pareja.
Los efectivos hallaron a la víctima con la cara ensangrentada. Según manifestó, el hombre la habría golpeado por negarse a vender dos bicicletas robadas.
El agresor, quien habría estado alcoholizado, forcejeó con los policías y le aplicó golpes de puño a una de las oficiales.
Revictimización
Laura Britos, integrante de la ONG Oasis, dijo que «lo sucedido va en contra de la Ley de Violencia Familiar»
«La Justicia debe dar una respuesta por que lo que ocurrió es una aberración. Esto es una revictimización de la mujer. Acá hay una responsabilidad de las instituciones que impiden la posibilidad de recuperación», señaló.
Añadió que «la Ley prevé que la mujer deba estar en el lugar de residencia y se retire al varón golpeador».
«Lo que está faltando, como en muchas otras leyes, es que el Estado brinde las garantías para su ejecución. Hay mucha reincidencia y esto habla de la nula fectividad en los seguimientos de los agresores», indicó.
La especialista sostuvo que, «como ONG, lo que podemos hacer es trabajar en la prevención educativa».
«Ayudamos a la reflexión y vamos a realizar en los colegios secundarios un trabajo sobre violencia en el noviazgo», anticipó.