Motos secuestradas revelan cómo son preparadas para realizar picadas

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“Las picadas son para los chicos un hobbie donde ponen en riesgo la vida” Lo dijo José Antuña, responsable de Tránsito en el Edecom, luego de que Telediario reflejara el impacto de las corridas a alta velocidad en noches de descontrol e incidentes.
En el depósito del ente hay 1.200 motos secuestradas y más de 300 no podrán ser rematadas ni han sido recuperadas por sus dueños debido a que fueron manipuladas para realizar picadas.
Antuña precisó que las motos son reestructuradas «casi por completo». Les quitan los espejos retrovisores, frenos, luces y los plásticos que recubren la carrocería.
En la mayoría de los casos, modifican los carburadores para otorgarles mayor potencia y cambian el sistema de suspensión.
Los escapes libres son una señal distintiva de las motos preparadas para picadas y hay unidades a las que le quitaron hasta el asiento para reducir el peso.

Operativos

“Nosotros venimos realizando operativos, especialmente los domingos. Las picadas son un hobbie de estos jóvenes , en el que arriesgas sus propias vidas. No tienen respeto por la vida de ellos y mucho menos por la de terceros”, destacó.
Añadió que cuando el Edecom y la Policía llegan a realizar los controles en Plaza Hundida, Plaza Mójica, el sector del viejo Hospital y calle Presidente Perón “al observar la presencia de los móviles se dispersan a alta velocidad con 2 o 3 personas en motos”
“A estos lugares van mamás con bebés muy pequeños arriesgando sus vidas. Nos vemos imposibilitados de hacer una persecusión por los riegos que implican para la integridad de los chicos. Lo que hacemos son controles permanente en las motocicletas para advertir escapes libres ó rodados adulterados”, indicó.
El funcionario dijo que  “los motociclistas no solo generan problemas con los escapes libres, sino que afectan a otros conductores, han apedreado a servicios públicos y hasta tiran pirotecnia debajo de los vehículos”
“Hasta que los jóvenes no desistan de este tipo de prácticas vamos a seguir realizando controles”, subrayó.

“Buscamos repeler”

El comisario mayor Carlos Borsato, jefe de la Unidad Departamental, destacó que por los incidentes ocurridos el pasado fin de semana “hubo jóvenes demorados y se abrió un expediente contravencional”.
“Efectivamente esa noche hubo disparos con armas de bala de goma para repeler a este grupo de 80 motociclistas que intentó agredir al personal policial”, indicó.
Admitió que “estas situaciones pasan habitualmente y por eso se incorpora información de los movimientos que se producen vía Facebook”.
“Las molestias son permanentes y es muy conflictivo por la situación de los chicos. Hay que generar una comisión multidisciplinaria para escuchar a estas tribus urbanas y buscar una via de solución”, expresó.

Noche de infierno

Una noche  en medio de corridas, tiros y quejas de los vecinos reveló los graves incidentes por las picadas que se desarrollaron el pasado domingo en calle Perón, a la altura del Parque Industrial.
Los chicos de entre 12 y 20 años admiten que la modalidad es ilegal, pero afirman que no la abandonarán “hasta que haya un lugar habilitado”
“Estábamos todo un grupo de amigos de las motos. Vino la Policía y mientras cruzaba un campo tiraban tiros al azar. Había mucha gente que llegó para ver las picadas y todos quedaron expuestos”, señaló uno de los motoqueros.
Resaltó que “había 200 personas y estábamos haciendo picadas porque no tenemos un lugar”.
“Lo que nos queda es la calle, no tenemos plata para ir a un circuito. La idea de las carreras es el escape libre y deberíamos usar casco, pero muchos no lo hacen”, subrayó.
Otro de los jóvenes admitió que “los vecinos y conductores se quejan por el ruido, pero muchas veces se vienen hasta con reposeras a mirar las corridas”
“Sabemos que es ilegal, pero para nosotros es un deporte. Si nos da un lugar, nos vamos y listo”, aseveró.

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