Los asaltos a bancos en Estados Unidos se han transformado en un escenario digno de ‘Misión Imposible’, la serie de películas donde Ethan Hunt, el personaje interpretado por Tom Cruise, oculta su verdadero rostro bajo una máscara de látex para engañar a sus adversarios.
En los últimos años, personajes apodados por la policía como ‘El vejete’, ‘Niño bonito’ o ‘El calvo’, atracan bancos ocultando sus rostros detrás de máscaras de látex, tan sofisticadas que son fabricadas con pelos verdaderos, cubiertas con pintura hiperrealista, tienen arrugas bien marcadas y se adhieren tan perfectamente que es imposible descubrir la identidad del atracador detrás de ellas.
Las máscaras logran esconden la edad de la persona, acompañan el movimiento de sus expresiones faciales y ocultan, incluso, la raza de quien las usa. Son, en la opinión de especialistas, un trabajo perfecto de efectos especiales. «Esto es un problema cada día más serio y preocupante. Las máscaras son de una tecnología muy sofisticada y muy difíciles de detectar», dijo recientemente Phil Gay, el presidente de la Asociación Nacional de Seguridad Bancaria.