El municipio concluyó obras en la escuela Tobar García

0
Compartir

Funcionarios de Desarrollo Urbano y Desarrollo Social recorrieron junto a técnicos de la empresa constructora las obras terminadas de la 2° Etapa del Tobar García.

Esta mañana el Subsecretario de Obras Públicas Mario Leonardini presentó formalmente el final de obra de arquitectura en el taller protegido Tobar García, en donde trabajan 40 personas con discapacidad vinculadas a la elaboración  de diferentes productos.
El taller se encuentra en los viejos hangares del ferrocarril, sobre el Boulevard Almafuerte; es decir en el predio El Andino.
La empresa Cis S.A estuvo a cargo de la obra de remodelación estructural y el acondicionamiento que posibilitará equipar adecuadamente a cada sección de fábrica.
“En poco más de dos semanas se trasladarán las máquinas y ya comenzarán con la elaboración de los productos”, explicó el funcionario.
Según dijo la transformación forma parte del programa de recuperación de todos los espacios del Andino. Leonardini recordó en ese sentido que en una primera etapa se refaccionó totalmente la fábrica de bolsas de polietileno, luego ocurrió lo mismo con los edificios que funcionan como aulas del Peam y finalmente hoy se presentó la nueva fábrica de dulces y pastas.
“Desde ahora las fábricas funcionarán todas en el mismo espacio y con una marcada mejoría en la calidad de elaboración, ya que la idea es que se cumpla con los requerimientos del Senasa para que sean competitivos en el mercado”, agregó Leonardini al ser consultado. La inversión fue de 1.500.000 pesos y demandó 6 meses de trabajo.

40 jóvenes

Como se sabe el taller protegido Tobar García alberga a 40 personas con alguna discapacidad. Trabajan allí, de lunes a viernes, en la fabricación de distintos productos.
Puntualmente 15 de ellos lo hacen en la fábrica de bolsas de polietileno, 10 en la de pastas secas, otros 10 en la de mermeladas y 5 producen agua destilada.
Algunos de las elaboraciones ya son comercializadas a particulares, aunque la mayoría se dona a comedores comunitarios o centros de contención social.
“La intención es que con el cumplimiento de los requisitos sanitarios de rigor, los chicos puedan competir con sus productos en el mercado comercial y creemos que se podrán adquirir en algunas góndolas de los supermercados”, agregó finalmente el funcionario.

 

Commentarios

commentarios

Compartir