Fuerte rechazo opositor al discurso de De la Sota sobre la ayuda para Río Cuarto

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El gobernador condicionó los aportes a un triunfo de Minardi. Para la UCR y el PS «es una extorsión». «Intentar condicionar el voto amenazando con no ayudar a la ciudad si no se apoya a su candidato, es algo fuera de serie, totalmente antidemocrático”, expresó Birri.

Desde la oposición surgieron duras críticas al gobernador José Manuel De la Sota por el mensaje en el que condiciona la ayuda para Río Cuarto a un eventual triunfo del candidato Miguel Minardi.
«Sé que algunos de los que me apoyaron y creen que todo marchará bien si votan al actual gobierno municipal. Pero lamentablemente esto no es así, no se equivoquen”, dijo De la Sota.
Añadió, luego que: “como gobernador no puedo ayudar a un gobierno municipal que no se deja ayudar o que cuando lo ayudamos malgasta lo que le damos, o hace mal las cosas”.
Finalmente, De la Sota pidió a los riocuartenses: “Reflexionen y el 15 de abril vuélvanme a votar, votando a Unión por Córdoba y a mi equipo encabezado por Miguel Minardi y Juan Manuel Llamosas”.
El legislador radical Orlando Arduh manifestó que el discurso “es prácticamente una amenaza, casi una extorsión para todos los riocuartenses, ya que da a entender que no enviaría la coparticipación en caso de que Jure sea reelecto».
«Condicionar la ayuda y los recursos garantizados por la Constitución al triunfo de su candidato no son expresiones de un gobernante democrático, rozan el autoritarismo», señaló.
Por su parte, el Legislador socialista y presidente del Bloque del Frente Cívico Roberto Birri expresó que “era lógico esperar que De la Sota se involucre en la campañas por la elección del intendente de Río Cuarto, pero extorsionar a los vecinos con la amenaza de no ayudar a la ciudad si no gana el candidato de su partido es una muestra de intolerancia y falta de respeto por la voluntad popular que nunca nos hubiéramos esperado de De la Sota”
El legislador riocuartense agregó que  «ver al Gobernador de todos los cordobeses involucrado de manera personal en una campaña local, prometiendo obras para todos los gustos y agrediendo al resto de las fuerzas políticas ya es discutible, pero intentar condicionar el voto amenazando con no ayudar a la ciudad si no se apoya a su candidato, es algo fuera de serie, totalmente antidemocrático”.

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