La Primavera Árabe no sólo ha sacado a la luz la falta de libertades que sufrían los habitantes de Túnez, Egipto o Libia, sino que también ha sacado a la palestra las inmensas fortunas amasadas por tiranos como Ben Alí, Mubarak, Gadafi y por muchos otros dictadores que parecen tener los días contados.
El capital de uno de los hombres más buscados del momento, Muamar Gadafi, podría llegar a alcanzar los 110.000 millones de euros. La mayor parte -47.000 millones de euros- se encuentra en un fondo de inversión, en teoría público y soberano, pero que la familia Gadafi manejaba a su antojo.
Los dictadores árabes más ricos:
Ben Alí. La familia directa del déspota tunecino acumula en sus arcas 5.700 millones de euros, aunque los hermanos de su mujer, Leila, podrían disponer de una fortuna mucho mayor.
Mubarak. Se ha llegado a calcular que su fortuna personal asciende a más de 50.000 millones de euros, aunque recientes informes consideran que esta cifra es exagerada y que el ex-presidente egipcio podría no acumular más de 4.000 millones de euros.
Gadafi. De los 110.000 millones de euros que alcanzan sus arcas, tres cuartos pertenecen a un fondo público del que ya han sido devueltos al pueblo 10.000 millones.
Mohammed VI. Según Forbes, la fortuna personal del monarca marroquí asciende a 2.000 millones de euros, además de propiedades inmobiliarias de valor incalculable.
Al Maktoum. Forbes dice que las arcas del emir de Dubái han sufrido pérdidas del 60%; a pesar de ello ocupa el quinto puesto en su lista de «los monarcas más ricos», con 3.200 millones de euros.
Fuente: ABC