Por primera vez en ocho años, Berlusconi declara ante la Justicia por una causa de fraude fiscal

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El primer ministro italiano comparece hoy en el tribunal de Milán por el llamado caso Mediatrade, que investiga un supuesto fraude fiscal en la compraventa de derechos televisivos del grupo que pertenece a su familia. Es la primera vez que se sienta frente a un juez desde 2003.
En este proceso se investiga si el grupo Mediaset, propiedad de la familia Berlusconi, compró a través de su filial Mediatrade los derechos de películas a un mayorista estadounidense mediante el intermediario, Frank Agrama, y su empresa Wiltshire, para aumentar después los precios y permitir, con su recompra, evadir dinero al fisco.

El primer ministro llegó al juzgado a las 10 ( 5 hora argentina) para tomar parte en la audiencia preliminar, que se celebrará a puerta cerrada.
Es la primera vez que Berlusconi comparece ante el juez, en un caso por el que está investigado, desde hace ocho años, cuando en junio de 2003 el mandatario declaró ante los magistrados en el caso SME, en el que estaba acusado de corrupción a jueces, cargo del que fue absuelto en 2008.
Es además la primera vez que comparece ante un juez desde que el Tribunal Constitucional invalidó, el pasado enero, la ley del legítimo impedimento, que le permitía no acudir a las vistas alegando compromisos institucionales, indica el diario El País en su edición on line.
Antes del juicio, Berlusconi ha vuelto a utilizar sus medios de comunicación para defenderse de las acusaciones y atacar los jueces y la oposición, definiéndose a si mismo como «un perseguido». Esta mañana ha intervenido con una llamada telefónica en un programa de Canale Cinque para definir las acusaciones «ridículas y sin fundamentos».
Refiriéndose a los juicios en el está imputado, ha declarado que es «el hombre más imputado del universo y de la historia».
El mandatario italiano no había acudido ni a la reanudación del juicio en el que está imputado por fraude fiscal por el caso Mediaset, siendo declarado «en rebeldía» por los jueces, ni a las dos vistas fijadas la semana pasada por el caso Mills, en el que se le acusa de corrupción judicial.
A estos procesos se sumó el pasado 15 de febrero el juicio por el caso Ruby, en el que Berlusconi está imputado por supuestos delitos de abuso de poder e incitación a la prostitución de menores, y que comenzará el 6 de abril con procedimiento inmediato.

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