El fiscal Marcelo Martínez Burgos pidió la detención de Cristian Urrizaga, uno de los integrantes de Gran Hermano 2010, el reality show de Telefe, informó esta mañana Radio 10.
Es por una denuncia que presentó un abogado, quien reconoció al personaje de la casa Cristian U como quien lo agredió en abril pasado.
En esa fecha, según el relato que dio Radio 10, Urrizaga y otros dos cómplices le habrían desfigurado la cara al abogado, quien había ido a buscarlo a un maxikiosko para pedir testigos de un ilícito.
En esa oportunidad, según la denuncia reproducida por la emisora, tanto Cristian Urrizaga como sus acompañantes lo echaron al grito de “tomátelas, no tenés nada que hacer acá”.
En ese momento, ingresó un menor de edad y el propietario del comercio (con un aparente vínculo con Urrizaga) le vendió una bebida alcohólica, situación que fue observada por el denunciante que realizó un llamada de atención al comerciante. En ese momento se inició una discusión que derivó en una pelea que terminó con las graves lesiones y la rotura de una computadora portátil.
Al hacer la denuncia el abogado, la Policía fue al lugar donde ocurrieron los hechos, pero no encontró a nadie. De hecho, el comercio estaba cerrado y desde ese momento, en abril de 2010, no abrió nunca más.
El abogado, después de varios meses, lo reconoció ahora, cuando vio su cara en el reality show y volvió a denunciarlo ante la Justicia. Tras esa presentación, el fiscal Martínez Burgos pidió su detención y no se descartaba que pueda firmarse hasta una orden de allanamiento a la casa de GH.
La causa ahora está en manos del juez Gabriel Ghirnalda, quien debe decidir si convoca al participante de Gran Hermano o desestima el pedido realizado por la fiscalía, quien lo acusó de los delitos de lesiones, daños y hurto.
Cabe recordar que justamente Cristian U empezó se descompuso el martes por la mañana. Tirado en un sillón y otra participante, Loreley, lo encontró con la presión baja.
Rápido, Martín P. fue hasta al confesionario para pedirle al Gran Hermano un médico y a los pocos minutos, apareció la clásica placa del programa con la que cortan la transmisión de 24 horas.
Cuando volvieron las imágenes, Cristian no acusó nada, todo siguió igual y durante el día no se mencionó el incidente ni pareció una broma del día de los Santos Inocentes ¿Qué pasó?