Los 17 barrabravas argentinos que fueron deportados de Sudáfrica regresarán al país mañana, una vez que sean alojados en el próximo vuelo que se consiga para ellos.
El comisario mayor Hugo Lompizano, quien encabeza el grupo de la Policía Federal que custodia a los violentos en Sudáfrica, explicó que el motivo fue que «provocaron disturbios y se pelearon entre ellos» durante el partido entre la selección argentina y Nigeria, el sábado pasado.
Además, precisó que varios de los deportados tenían como finalidad identificar a hinchas argentinos famosos que estuvieran de paseo por las calles de Sudáfrica y acercarse para pedirles dinero. Si no conseguían el objetivo, los increpaban y amenazaban.
El comisario remarcó que el motivo más grave de la deportación fueron los disturbios que provocaron entre ellos, en una interna que trasladaron hacia ese país africano.
«Fueron localizados en la cabecera sur de la tribuna cuando se peleaban entre ellos. Se acercó el zoom de la cámara que los filmaba y se los identificó», precisó Lompizano en declaraciones a Radio 10.
El efectivo de seguridad reveló que días antes la Policía sudafricana «habló con ellos para explicarles las leyes de ese país y cómo debían comportarse, pero no lo hicieron».
Lompizano remarcó que buscan a cuatro barras, integrantes del violento grupo de San Lorenzo denominado «La Gloriosa Butteler», que «apretaron» hace unos días al presidente de ese club, Rafael Savino.
«Ya pusimos en conocimiento de estas cuatro personas a la Policía sudafricana», precisó Lompizano a C5N.