La menor producción de leche que se ha obtenido durante el primer cuatrimestre del año -causada por las lluvias y temperaturas excesivas de finales de 2009 que complicaron la alimentación mediante alfalfa y cuestiones conocidas de estacionalidad- explican la caída en las exportaciones. Es que para abastecer el consumo interno con una producción menor, no hay otras alternativas.
Sin embargo, se espera un cambio de rumbo a partir de los próximos meses, ya que la firmeza de la demanda internacional –impulsada por el crecimiento del consumo en países emergentes-, el buen precio que recibe el productor y la menor intervención estatal han generado expectativas sobre la recuperación de la actividad, donde las inversiones ya comienzan a asomar.
Es así que de los $0,80 que recibía el productor a mitad del 2009, en marzo del presente el precio ha alcanzado a $1,15 según datos de Infortambo, aunque la Subsecretaría de Lechería informó que para éste mes el precio promedio fue de $1,20. A la espera de la publicación del precio pagado en abril, que se sabe ha ido en aumento, se estima una estabilidad para los próximos meses.
Fuente: Infortambo
La incertidumbre radica en el precio que pagarán las empresas lácteas una vez que haya más oferta, tras la recuperación esperada de la producción para el segundo semestre del año. No obstante, tanto productores cómo especialistas se muestran optimistas respecto del curso de los años venideros ya que además del repunte interno, se observa una tendencia similar a nivel mundial.
“ESTA ES UNA PUBLICACIÓN DE FUNDACIÓN EGE CON LA COLABORACIÓN DE Valentina Vázquez – MIEMBRO DE FUNDACIÓN EGE – info@fundacionege.org”