El doctor José Sagarraga, abogado de Nancy Carena, manifestó que «no puede ser que cuando un policia brinda un testimonio en contra de un detenido es un elemento de convicción suficiente y cuando lo hace la víctima la postura es distinta». Resaltó en relación al abuso sexual que habría cometido Auce que «la ausencia de un testigo directo no quiere decir que no haya ocurrido». La presentación del abogado se realizará ante el fiscal y luego sería derivado al juez de Control. Ayer, Auce quedó en libertad y la causa sumó la imputación de otros 3 policías.
El doctor José Sagarraga, abogado de Nancy Carena, señaló que en su condición de querellante se opondrá a la falta de mérito para el suboficial ayudante José Auce por el delito de abuso sexual, en el marco de la investigación por el escándalo en la Alcaidía.
Sagarraga manifestó que «no puede ser que cuando un policia brinda un testimonio en contra de un detenido es un elemento de convicción suficiente y cuando lo hace la víctima la postura es distinta».
Resaltó en relación al abuso sexual que habría cometido Auce que «la ausencia de un testigo directo no quiere decir que no haya ocurrido».
La presentación del abogado se realizará ante el fiscal Julio Rivero y luego sería derivado al juez de Control.
Ayer, Auce quedó en libertad, aunque sigue acusado de peculado, vejámenes y abuso sexual.
El fiscal decidió, además, imputar al sargento Oscar Gutiérrez y el sub comisario Claudio Olguín por coautoría en los delitos de peculado y vejámenes por los hechos ocurridos entre la tarde del 27 de enero y la madrugada del 28 del mismo mes.
Además, acusó al sub comisario Gutavo Della Mea -un hombre reconocido de la División Investigaciones- por peculado y vejámenes, artículo 306, última parte.
«A 50 pesos»
De la investigación del fiscal se desprende que Auce habría sustraido del consultorio médico de la Policía una cantidad no determinada de psicofármacos (Clonazepan 2mg y Alprazolam) para ser comercializados con detenidos bajo prescripción médica.
«Se les habría entregado a varias personas de sexo masculino arrestados en la celda 13 (entre ellos a un sujeto apodado «lechón delgado» y otro llamado «jorobado») a cambio de 50 pesos por el alcohol y de 30 pesos por las pastillas», indicó.
Añadió que «se mezclaban los medicamentos con alcohol, agua y jugo de naranja».
Auce habría entregado, además, a 3 mujeres 14 pastillas. Una de ellas debió ser hospitalizada por la ingesta excesiva de los psicofármacos. A dos de las mujeres les exigió canjear la droga por besos.