Se trata de cuatro nadadores y tres asistentes, que el sábado fueron arrastrados por la corriente durante una competencia de aguas abiertas.
La búsqueda, hasta ahora infructuosa, de los siete deportistas es coordinada por las patrullas de las prefecturas paraguayas y argentinas, que utilizan medios aereos y fluviales, informó la Prefectura Naval Argentina de Posadas.
Tan sólo a unos 300 metros de la partida, un grupo de nadadores y remeros fue succionado por una fuerte corriente del río Paraná, mientras realizaban el cruce entre la ciudad paraguaya de Encarnación y la argentina de Posadas, ante la mirada atónita de otros competidores y sus acompañantes que se trasladaban en distintas embarcaciones.
De acuerdo con un informe de la Prefectura Naval Argentina, los desparecidos son Sebastián Rusesky, de 19 años; Fernando Solé Masés, de 12; Víctor Sessa, de 36; Nicolás Levequi, de 15; Mauro Bacigalupi, de 24; Manuel Leiva, de 57, y Eugenio León Seró de 59 años, a quien en principio erróneamente se dio por fallecido.
En principio, el hecho dejó como resultado la muerte de Luis Roberto «Lobo» Saide, de 56 años, oriundo de Reconquista, quien viajaba en una piragua como guía de su hija, que competía. Además, el nadador Sebastian Coll, de 18 años, permanece internado en el sector de terapia intensiva del Hospital Central de Posadas, como consecuencia de un edema cerebral debido al golpe que sufrió contra la barcaza.