Estanguet y Cola distendidos en el agreste paisaje de Chile.
En medio del Dakar y del dia de descanso de esta exigida competencia, Julio Estanguet el piloto riocuartense, mantuvo una charla exclusiva con Telediario Digital. Es valorable el esfuerzo y la tenacidad de los cuatro pilotos de nuestra ciudad el haber alcanzado ya la mitad del Rally Dakar.
Clasificación General :
Federico Cola está en el puesto 76.
Julio Estanguet en el 12 lugar.
Gastón Gonzalez y Christian Rudi se ubican en el lugar 55 del Rally Dakar 2010.
Mientras le realizaban masajes para recuperar los músculos luego de la ultima etapa, que significo 15 horas de manejo, Julio reconoció que se viven momentos limites, que muchas veces tiene miedo, y que tiene que hacer de piloto, copiloto, mecánico, y psicólogo cuando en medio de la competencia solo esta él y su cuatri.
Al preguntarle sobre el balance personal que hace de esta competencia hasta el momento, contestó: «Ha sido muy dura, muy largas las etapas, tuvimos problemas en la etapa de Fiambalá que rompí el cuatri, me di vuelta, y estuve 8 horas en medio del desierto sin agua, fue realmente duro. Donde lo que más haces en rezar, se te cruza toda la vida, entre el miedo, y la desesperación. Fue ahí donde se me rompió el cuatri, lo arreglé y a los 20km se me rompió la transmisión, estuve 8 horas parado, tratando de arreglarlo, al principio no sabía lo que era, los autos y los camiones pasaban, algunos paraban y trataban de ayudarme o de decirme que podía ser. Eso me complicó bastante, ahí fue cuando dijeron que había abandonado.»
En cuanto a su estado físico mencionó que el entrenamiento que realizaron nueve meses antes de la competencia fue muy útil y le sirvió mucho. Que su cansancio es el normal, y que se siente bien psicológicamente.
«Ahora la estrategia es ir despacio para llegar, ya estoy conforme con lo que hice y no voy a cometer errores. Realmente es algo increible lo que se vive aquí en medio de la competencia, a pesar de que no tengo mucho tiempo, es muy lindo el clima que se vive. Porque llego, me baño, hacemos la hoja de ruta del otro día, me dan masajes, comemos y a descansar, ya que son muy pocas horas la que tengo para dormir, sólo duermo 3 o 4 horas por día»
«Esto es como un pueblo que se muda todos los días, se arma y se desarma para ir acompañando cada etapa. Aquí todos se ayudan. Hoy que es el día de descanso y todos los argentinos nos juntaremos a comer un buen asado, aprovecharemos para descansar bien y realizar buenos masajes».
Por último el piloto riocuartense agrego: «Quedan dos etapas muy duras, la del domingo y la del lunes, el resto ya es un terreno más conocido por los argentinos. Mis saludos para todos, desde acá se siente el aliento de la gente de Río Cuarto».
Sin lugar dudas la emotividad del relato superaron las cuestiones técnicas de la competencia. Las palabras de este hombre ponen de manifiesto las situaciones límites que se viven en el marco del Dakar. El Dakar que todos los riocuartenses corremos y seguimos a través de estos cuatro «gladiadores».