Caso Monchamp – De la actividad médica no se espera la respuesta de un Dios ni un milagro sino una diligencia lógica

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La Cámara Segunda del Crimen dio a conocer los fundamentos del juez Carlos González Castellanos, quien condenó a 2 años en suspenso de prisión al neurólogo riocuartense. «En este caso surge claramente que ante el conocimiento pleno que el doctor Monchamp tenía de la paciente no efectuó las diligencias necesaria lo que convierte a su actuar profesional en negligente para con María Guadalupe Juárez», subrayó el magistrado.

INGRESE Y ACCEDA AL TEXTO COMPLETO DE LOS FUNDAMENTOS.

Se conocieron este mediodía los fundamentos del juez Carlos González Castellanos por la condena de 2 años de prisión en suspenso para el neurólogo riocuartense Bernardo Francisco Monchamp (70), acusado de homicidio culposo por la muerte de la paciente María Guadalupe Juárez, ocurrida el 7 de agosto del 2003, en la Clínica Regional del Sud.
El juez argumentó que «de los elementos de prueba desarrollados y relacionados surge claramente que Bernardo Francisco Monchamp conocía en su totalidad la patología de la paciente María Guadalupe Juárez».
«De la actividad médica no se espera la respuesta de un Dios ni un milagro, se pretende la diligencia lógica que requiere la ciencia médica. En este caso surge claramente que ante el conocimiento pleno que tenía de la paciente no efectuó las diligencias necesaria lo que convierte a su actuar profesional en negligente», sostuvo.
Para el juez, «Monchamp debió realizar todas las medidas necesarias tendientes a analizar si se debía reinstalar el catéter de drenaje de líquido céfalo raquídeo, que era el problema principal de la paciente».
«A Monchamp se le reprocha no haber realizado las diligencias necesarias para solucionar el problema de la paciente con una sintomatología concreta  y hubo retraso en el diagnóstico.  Monchamp no debió dejar pasar tanto tiempo ante los permanentes requerimientos de la madre que era quién acompañaba en todo momento a su hija tanto en las consultas como en las intervenciones médicas», indicó.
Finalmente, el juez resaltó que la responsabilidad del neurólogo «se encuentra plenamente acreditado y con certeza absoluta»

La investigación

Durante la instrucción, el fiscal Walter Guzmán había señalado que Monchamp «actuó con negligencia en su profesión durante el transcurso de tiempo que asistió a su paciente María Guadalupe Juárez».
Recordó que la joven ingresó con diagnóstico de hipertensión endocraneana pero a criterio del médico no era necesaria la internación.  Cuando finalmente se decidió que sea derivada a una habitación de la Clínica, Monchamp omitió realizar a su debido tiempo el estudio encefálico -tomografía computada o una resonancia magnética- «que los antecedentes clínicos de la paciente ameritaban y que le hubiera permitido detectar a tiempo la afección de Hidrocefalia severa que padecía»
Para Guzmán, «este obrar negligente de Monchamp le ocasionó a María Guadalupe Juárez la muerte, ocurrida el 7 de agosto del 2003».

Aquí: Texto completo de los fundamentos

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