Cuantas veces nos hemos preguntado si lo que nos sucede es debido a lo tanto que tenemos. Si fuésemos un país pobre, no tendríamos la tentación tan a mano. Pero estamos en un lugar donde el dinero fluía a raudales y así lo dilapidamos. De ser el granero del mundo, estamos peor que países que no fueron bendecidos en el reparto. Al leer la prensa del exterior, notamos la tremenda diferencia.
Ataques con coches bomba en un lugar concurrido. Las victimas son sus propios compatriotas. Durante años y años la gente se mata por una idea. Las personas van y vienen corridas por las matanzas de quien sea. No son guerras sino simplemente ambiciones personales. Lo hemos visto relativamente cerca, en Cuba. Se enquisto en el poder y solo trajo miseria al pueblo. Otros quisieron imitarlo y han obtenido los mismos resultados. Todo para ellos.
En este país se quiso hacer y hoy hubiéramos tenido los mismos resultados que allá. Todos corren tras el dinero. Hoy se disfrazan las palabras con frases bonitas, sin contenido. Todas son cosas virtuales como Patria, Estado, Gobierno, beneficios y otras tantas. Nada nos dicen concretamente. Se divaga y nos llenan los oídos con «melodías» de ensueño. Y se apoyan en lugares donde están concentrados los delincuentes, barrabravas y políticos.
¿Han conversado con personas honestas que fueron a la cárcel por error? Los jóvenes que están por delitos graves, se burlan de las victimas, como si fuera una gracia. Son irrecuperables, aunque hay algunos que son diferentes. Pero todos van a un mismo lugar. ¿Por qué hay que llevar a los delincuentes a Tribunales? Que vayan los jueces y fiscales a convivir con los presos. Veríamos si no hacen algo más que dictar sentencia.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Rio Cuarto