El abogado Enrique Zabala había pedido a la jueza Graciela Filibertti que sean exhumados otros dos cuerpos del cementerio de la Concepción. Se trata de los restos de Brígida Guzmán -quien habría tenido un hijo con el hacendado – y de la esposa de Angel Guzmán, Alicia Molina. Buscan completar los datos genéticos de los presuntos herederos. Luego, se ordenará el cotejo formal de los ADN con el de Manubens Calvet.
En el Cementerio de Río Cuarto exhumaron otros dos cuerpos para determinar los ADN de los presuntos herederos riocuartenses del multimillonario Feliciano Manubens Calvet, quien dejó una fortuna de 400 millones de dólares.
El abogado Enrique Zabala había pedido a la jueza Graciela Filibertti que sean exhumados dos cuerpos del cementerio de la Concepción.
Se trata de los restos de Brígida Guzmán -quien habría tenido un hijo con el hacendado – y de la esposa de Angel Guzmán, Alicia Molina.
Guzmán, un ex presidiario, sería el hijo que Manubens Calvet tuvo a los 16 años.
Zabala, abogado de 3 sucesores de Guzmán, buscan completar los datos genéticos de los presuntos herederos y luego solicitará que se ordene el cotejo formal de los ADN con el de Manubens Calvet.
La sospecha
Manubens habría tenido relaciones con una mujer de 26 años en Villa Dolores, quien luego se trasladó a Río Cuarto, donde dio a luz a Ángel Humberto Guzmán, quien luego paso por la cárcel por una condena de homicidio.
Cuando en 1981 murió el hacendado y político conservador de Traslasierra, Córdoba, quedó en danza una fortuna calculada en 200 millones de dólares. Manubens Calvet nunca se casó, no tuvo hijos, ni hermanos. Pero luego de su muerte aparecieron treinta y tres sobrinos y sobrinos nietos que iniciaron un juicio sucesorio en Villa Dolores por considerarse herederos «universales».
Empezó una larga disputa judicial en el que se presentó una joven paraguaya que dijo ser hija natural del hacendado, aunque en realidad se llamaba Juan González Cibils, y no tenía nada que ver con Manubens Calvet.
También apareció otro supuesto hijo natural del hacendado y hasta se vio comprometido a una alta autoridad de la Iglesia. Margarita Woodhouse, que vivió cuarenta años con el multimillonario.
Ahora, con una vinculación directa a Río Cuarto, surgen nuevos posibles herederos y se reinstala la polémica.