Compartí con el señor Raúl Alfonsín 48 horas de extensa charla y examen cardiovascular

0
Compartir

ESPECIAL TD DIGITAL

El doctor Guillermo Francisco Amuchástegui recuerda en un relató inédito e histórico cuando cumplía la residencia de Cardiología en el Hospital y asistió al doctor Raúl Alfonsín en los 90. «Había presentado un dolor de pecho luego de subir escaleras para entrevistarse con una conocida radio. Estuve de guardia esa noche, y creo que no fui mas veces a la habitación porque dormía placidamente», destacó.

Envíe su opinión y recuerdo de Raúl Alfonsín a: telediario24horas@yahoo.com.ar

Carta enviada a Telediario por el doctor Guillermo Francisco Amuchástegui . DNI 14.132.076.

Cursaba cuarto y ultimo año de Residencia de Cardiología en el Hospital Italiano de Buenos Aires, a principios de los 90, cuando mi jefe el doctor  Juan Krauss me pega con una historia clínica en el pecho y agrega: «se interna el ex presidente, no hablas con nadie, no das informes, me hablas solo a mi y ojo con los teléfonos…». Al rato,  compartía con el «Señor» Raúl Ricardo Alfonsín 48 horas de extensa charla y examen cardiovascular.
Había presentado un dolor de pecho luego de subir escaleras para entrevistarse con una conocida radio. Estuve de guardia esa noche, y creo que no fui mas veces a la habitación porque dormía placidamente.
Recién comenzaban los celulares, que sonaban tanto como los fijos, y yo era el encargado de contestar. Llamaban desde la secretaria de Neustad, Grondona o recibía al medico personal de Menen. Hablé solo con mi padre y nada con los medios. Había que estar concentrado para tanta presión. Otro día les cuento anécdotas…
Fue inolvidable aquel momento, fue un premio para mi que había viajado a Parque Norte, al acto de Ferro, al Obelisco del millón de personas(en un R12 de no se quien!!!). Sin ser un militante, participaba como un tipo de 20 años, con algo de defender los valores de libertad y democracia.
En síntesis, entreviste como médico, que no es poco por las preguntas que prepare, a una persona a la cual yo admiraba. Tuve tiempo para hacerlas y conocimiento de su historia.
Me pregunto,  de Río Cuarto? A… esta Abella y seguimos…cada una de sus respuestas, brillantes, pensadas, pero con un cariño en su rostro para ayudarme a mi examen. Sentimental, concreto, muy sincero….
Al segundo día, como yo era el único que podía entrar, ya tenia la confianza de hacerle criticas, ya estaba agrandado….!!!
Años antes tuve la misma experiencia con el Almirante Rojas, y comparar estas personas no tienen razón ni análisis para ser escritas.
No fue mi mejor historia clínica, todos los días lo hago aquí, solo quiero contarles que como residente fue una experiencia inolvidable con un persona notable, que estaba seguro pasaría a la historia. No vale la pena, que es la que siento en este momento, comentar mas detalles de este encuentro….
Ha muerto una gran persona, un político-estadista con ideas muy claras, un gobernante decente y pacifico, un señor con todas las letras, solo respetado por los mas cultos y lamentablemente no entendido por otros que dejaron pasar la gran oportunidad.
Le escribí una carta, que ahora la voy a buscar, a ver si me equivoque tanto… no creo,,,, porque después vino Menen, De La Rua y Kischner.
Gracias a la medicina que me dio la oportunidad de entrevistar o examinar a un personaje tan EJEMPLAR. Viajo a despedirlo, como lo hice con otros grandes.
Seguro que descansa en paz. Lo tiene bastante merecido.

Commentarios

commentarios

Compartir