El joven, Darío Debbia, se abstuvo de declarar. Los familiares reclamaron frente al Palacio de Tribunales. Habría estado durante las horas previas al homicidio con la víctima fatal y creen que una discusión en el momento provocó la violenta reacción. El rostro del hombre fallecido estaba desfigurado.
El único acusado del crimen de Rolando Álvaro Santillán de 37 años, ocurrido el pasado fin de semana en el barrio Calasanz, negó los hechos ante el fiscal Javier Di Santo y luego se abstuvo de brindar declaraciones.
Los investigadores creen que el robo no fue el móvil del hecho como se presumió inicialmente.
El joven, Darío Debbia, habría estado durante las horas previas al homicidio con la víctima y creen que una discusión en el momento provocó la violenta reacción. El rostro del hombre fallecido estaba desfigurado por los golpes recibidos.
Los familiares de Debbia reclamaron frente al Palacio de Tribunales por su libertad.
El hecho
La víctima presentaba un traumatismo cráneo facial. Estaba tendido boca arriba en un pasillo con malezas ubicado en Río Segundo al 1.100 del Barrio San José de Calasanz.
El deceso habría ocurrido en la madrugada del sábado, alrededor de la 1.30. Pero recién en horas del mediodía, unos niños que jugaban en el sector, descubrieron el cadáver.
El detenido Debbia está imputado de homicidio simple. El joven tiene 18 años y registra frondosos antecedentes. La Policía lo apresó a pocas cuadras de su vivienda. Los investigadores le secuestraron elementos que podrían complicar su situación.
Santillán era oriundo de la ciudad de Córdoba. Desde hacía dos años trabajaba en una maderera en nuestra ciudad.
El documento del hombre fue hallado donde vivía, en una habitación que alquilaba en Banda Norte. Un amigo anoche lo reconoció en la morgue del Hospital.
Si bien varias personas fueron citadas por el Fiscal Javier Di Santo para ver si reconocían al sujeto sin vida, nadie pudo establecer su identidad. El joven se hallaba tendido boca arriba con traumatismo cráneo facial.