Cuatro años después de la denuncia de los menores de entre 9 y 13 años abusados en la extinta Residencia Roca, finalmente este miércoles enfrentará el juicio el puntero político Jorge Ravera, único acusado por los aberrantes hechos.
Cuatro años después de la denuncia de los menores de entre 9 y 13 años abusados en la extinta Residencia Roca, finalmente este miércoles enfrentará el juicio el puntero político Jorge Ravera, único acusado por los aberrantes hechos.
En la primer audiencia eclaran una psicóloga, la ordenanza de la institución y un docente.
Ravera está imputado de abuso sexual reiterado agravado en 4 hechos, abuso sexual con acceso carnal reiterado en 3 hechos y corrupción de menores agravado.
La estrategia legal permitió que se postergara el comienzo del juicio y la principal prueba, el testimonio de los menores abusados en la Cámara Gesella, pudo haber caído por un planteo de la defensa. Finalmente, la Cámara Segunda del Crimen rechazó todos los pedidos de nulidad de la defensa y el puntero justicialista enfrentará el banquillo.
«Les creímos»
«Siempre creímos que los chicos decían la verdad. Algunos intentaron acusarlos de fabuladores pero desde un primer momento sabíamos que no mentían y eso quedó demostrado en la Cámara Gesell» Lo manifestó Fabricio Castellanos, ex docente de la Residencia Roca.
Para Castellanos, «la causa estaba muy politizada y esto perjudicó la búsqueda de la verdad y los tiempos. Incluso el gremio dudaba sobre si debía defender ó no a un abusador».
Tras los abusos -que habrían incluido manoseos, maltratos y la violación con acceso carnal- el centro de contención cerró definitivamente y los menores fueron derivados.
Uno de los pequeños abusados estuvo algunos meses con Fabricio en su hogar hasta que la Justicia le generó un destino definitivo. También Irma Aguirre contuvo a algunas de las víctimas con autorización del Juzgado de Menores.
«Voy a ir al juicio para acompañar a quienes eran mis alumnos. Fue terrible lo que pasó. Pero, como docente quiero estar junto a los chicos», subrayó.
Testimonios clave
Las víctimas complicaron la situación del ex puntero político justicialista Ravera al asegurar que los sometía a manoseos y palizas para evitar que contaran lo que les pasaba.
Uno de ellos, que habría padecido un retraso mental, habría sido accedido carnalmente.
«Les conté que en el hogar, cuando comíamos, él hablaba de cosas de sexo y cuando nos íbamos a dormir nos toqueteaba. Después se acostaba con uno de los chicos», relató el menor de 14 años, que tenía 9 cuando fue abusado.
Recordó que «Jorge» violó a uno de los niños quien debío ser derivado a Córdoba para su asistencia.
«Manoseba a todos pero se acostaba con uno a la noche. Nos pegaba… nos hacía muchas cosas. Cuando le decíamos algo nos hacía cagar y nos llevaba a dormir», señaló.