El paso de la vida o la vida que nos pasa por arriba, nos hace ver cosas de diferente manera en que lo hacíamos hace años. Luego de haber dejado lo mejor de nosotros en un trabajo a cambio de una «limosna» de nuestros patrones, obtenemos una «miseria» del Estado. No comprendemos muy bien ya que algunos dicen que los fondos aportados por nosotros durante muchos años, es nuestro o de ellos. Pero lo dejaremos para que los jueces que no saben, perdón, que saben mucho, lo aclaren; oscureciendo. Solo meditemos sobre algo importante.
Los tiempos se han estirado y acelerado. No bien hemos comenzado el año ya llega a su fin. Solo pensamos en que casi ayer, estábamos acompañando a los nietos a la escuela. Ya estamos pensando en los guardapolvos, lápices y otros artículos. Vamos acelerados. Es que «las malas lenguas» dicen que los jubilados no tenemos nada que hacer y por eso vamos a los bancos a cobrar a las 6, sabiendo que abren a las 8, aquí en las provincias. Lo que no comprenden esas personas es que necesitamos el efectivo para pagar al almacenero, verdulero, panadero y otros comerciantes que tuvieron el «coraje» de fiarnos. Vamos temprano para que no nos vean y sorprenderlos con billetes a media mañana.
Lamentablemente «apuramos» a los relojes en aras de cancelar y honrar las deudas. Esto es algo desconocido para los gobernantes ya que en nombre del país, han pedido y no pagado miles de millones de dólares. Lo haremos con nuestros fondos, por eso vamos al banco temprano por si se les ocurre «dejarnos colgados»
Todo tiene su razón. Es que se ha perdido la confianza.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Rio Cuarto