La menor había comenzado a ser abusada por sus padres y un remisero de la localidad cuando tenía solo 11 años. Ahora tiene 16. En una entrevista publicada por el canal local dijo que las violaciones no existieron pero desde la Justicia creen que pudo haber sido víctima de «aprietes». Para el doctor Félix Nieto (abogado del remisero), sus dichos deben ser considerados como indicio de prueba. La Justicia exigió que no tome contacto con su familia y sea contenida en un centro para menores. Las pericias forenses confirmaron las lesiones. Los 3 acusados están alojados en la Cárcel local.
Foto: Policía de Huinca Renancó.
El lunes, a las 9:30, comienza el juicio.
El doctor Félix Nieto, abogado de uno de los acusados por los reiterados abusos sexuales a una menor de Huinca Renancó, pedirá en el juicio que comenzará el próximo lunes que la víctima vuelva a declarar.
La menor había comenzado a ser abusada por sus padres y un remisero de la localidad cuando tenía solo 11 años, según surge de la investigación del fiscal. Ahora tiene 16.
En una entrevista publicada por el canal local, la joven dijo que las violaciones no existieron pero desde la Justicia creen que pudo haber sido víctima de «aprietes».
Nieto, sin embargo, consideró que la entrevista debería ser utilizada como «un indicio probatorio».
La Justicia local exigió que la joven no tome contacto con su familia y sea alojada en un centro de contención hasta que concluya el juicio que se desarrollará en la Cámara Primera del Crimen.
Los 3 acusados enfrentan una imputación por «abuso sexual con acceso carnal; corrupción de menores, abuso sexual sin acceso carnal con sometimiento gravemente ultrajante para la víctima calificado y corrupción de menores calificada».
El hecho
En el 2006, un vecino de la localidad del sur provincial llegó a la vivienda donde reside la madre de la menor y con el consentimiento de la mujer ingresó al dormitorio donde se encontraba la víctima. Allí se encerró y, tras una feroz golpiza, sometió sexualmente a la niña provocándole lesiones que fueron corroboradas por el análisis del médico forense Guillermo Mazuchelli.
La adolescente admitió que había sido accedida «desde hace tiempo sin su consentimiento, bajo amenazas por personas de su conocimiento».
La madre, «en reiteradas oportunidades le ofreció a la menor prostituirse si queria tener plata».
El segundo hecho ocurrió el mismo año y tuvo la participación de la madre y su pareja. En una habitación de la vivienda, ambos mantuvieron relaciones frente a su hija y luego comenzaron a golpear a la pequeña.
Del dramático contexto participó la progenitora, quien -según surge de la investigación- «la manoseó y la obligó a tener relaciones con el hombre que la acompañaba».