Oriente, además de productos manufacturados, nos ha provisto y nos provee de la sabiduría de miles de siglos. Han tenido la habilidad de ver, mirar y actuar en consecuencia. Eso le da la superioridad sobre el ser occidental que solo corre desaforadamente tras el dinero. Allá también se sacrifica al pueblo. Miles y tal vez millones «colaboraron» para crear la muralla china. Otros tantos se «perdieron» en la defensa en contra de las hordas salvajes de las estepas.
Hoy, con más de mil trescientos millones de seres, se conducen de manera que occidente no ve correcto. Es que se sigue sacrificando al pueblo para proveer de «basura» que compramos más allá de la muralla. Equipos que se le enviaron a fin de aprovechar la mano de obra esclava. Pero su forma de gobierno y leyes, son las adecuadas para esa tremenda cantidad de seres.
Dentro de la forma de gobernar, tienen dos leyes que, para ellos, son buenas. Los delitos por tráfico de drogas y las estafas de «guante blanco» son penados con la muerte por tiro en la nuca. Son siglos en que se aplica y a pesar de lo drástico, se sigue intentando. Estamos en la «globalización» y nos desesperamos por ver el avance del delito y la «cartelizacion» de la droga. Nos espantamos de saber que la corrupción llega a límites escandalosos. Son delitos que perjudican a todos en favor de unos pocos.
¿Y si importamos esas leyes? ¡No! Nos quedamos sin políticos, sindicalistas y gobernantes. Que siga como esta. Nosotros pagamos.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Rio Cuarto