Se desarrolló este mediodía en el Campus. Ayer hubo asueto por duelo en Humanas e Ingeniería y se reprogramaron turnos de examenes. Consternación en la comunidad universitaria por el fallecimiento de los jóvenes que formaron parte de centros de estudiantes y el Consejo Superior. La tragedia que vuelve a golpear a la Universidad a solo 6 meses de las explosiones en la Planta Piloto, que provocaron la muerte de 5 investigadores y un alumno.
Padre Carlos Juncos: «Estos chicos, a los que hoy recordamos, han sido capaces de sentir como propio lo que era de todos»
Emiliano Di Claudio: «Vamos a salir adelante, porque (Paula, Rubén, Juan Ignacio y Gonzalo) amaron y nos dejaron mucho, porque sembraron amor básicamente».
(Prensa UNRC – Telediario )- Con recogimiento y profundas muestras de dolor, la comunidad universitaria participó este martes de una misa en memoria de Paula Vanina Ochea, Rubén Félix Ochea y Juan Ignacio Quiroga, los tres estudiantes universitarios que junto al joven Gonzalo Rinaldi, recientemente perdieron la vida en un trágico accidente automovilístico.
Sensiblemente acongojados, familiares, amigos, profesores y autoridades de la casa de altos estudios, particularmente de las facultades de Ciencias Humanas y de Ingeniería, donde cursaban sus estudios los jóvenes fallecidos, colmaron el Anfiteatro 1 del Pabellón 2 del campus para tomar parte del oficio religioso, que estuvo a cargo del padre Carlos Juncos.
«Mañana tal vez tenga que sentarme frente a mis hijos y decirles que fuimos derrotados, que no supimos cómo vencer. Pero no podría sentarme y decirles que ellos hoy están así porque yo no me animé a pelear».
La frase, escrita en dos afiches blancos ubicados detrás del altar con la firma de Juan Quiroga, recibían y golpeaban la sensibilidad de todos quienes minutos antes de las 12 se congregaban para tomar parte de la misa. Durante su homilía, el padre Juncos destacó a Paula, Rubén, Juan Ignacio y Gonzalo como «personas que no tenían sus manos para elevarlas al cielo buscando su propio bien, sino que somos testigos de que han buscado el bien de todos, y ese es el camino a la eternidad». «Como dice la sabiduría bíblica y la oriental, de este mundo nos llevamos lo que damos, y aquello que quisiéramos conservar para nosotros mismos es lo que perdemos», señaló el sacerdote.
«El que se busca a sí mismo, el que no es capaz de hacerse cargo del sufrimiento ajeno, se perderá. Estos chicos, a los que hoy recordamos, han sido capaces de sentir como propio lo que era de todos», añadió.
«Las obras que hicieron y sus esfuerzos son los que han construido su camino a la eternidad y son los que nos dejaron la posibilidad de decir que hay necesidad de romper con el egoísmo en el que nos encerramos nosotros mismos para seguir luchando», rescató el padre Juncos, y agregó: «La herencia de los que se van es continuar sus luchas».
Luego de las reflexiones del sacerdote, el presidente de la FURC, Emiliano Di Claudio, dijo también unas palabras, en las que confió: «Vamos a salir adelante, porque (Paula, Rubén, Juan Ignacio y Gonzalo) amaron y nos dejaron mucho, porque sembraron amor básicamente».
«Nosotros, que fuimos sus amigos y sus compañeros de militancia, de ideales, de compartir las ansias de un mundo mejor, de una sociedad distinta, vamos a tener esa fuerza que tuvieron ellos hasta el último día para poder mejorar las cosas», subrayó Di Claudio visiblemente acongojado.
«Estas lágrimas son lágrimas de amor, y ellas no van a dejar que los olvidemos, pero nos darán la fuerza para salir adelante en la vida», indicó el dirigente estudiantil. Durante toda la celebración religiosa fueron incesantes las manifestaciones de dolor, pero también de afecto y contención que recibieron los familiares y amigos de los jóvenes fallecidos.
Las víctimas
Paula Vanina Ochea era presidenta del Centro de Estudiantes de Ingeniería, consejera estudiantil en el Consejo Directivo de la Facultad y cursaba Ingeniería Química.
Rubén Félix Ochea era alumno de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales, al igual que Juan Ignacio Quiroga, quien había sido presidente del Centro de Estudiantes de Ciencias Humanas.
Hondo pesar
La comunidad de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Río Cuarto manifestó «su hondo pesar por las víctimas del trágico accidente ocurrido el pasado sábado 28 de junio en el cual fallecieron estudiantes pertenecientes a nuestra Universidad, dos de los cuales eran estudiantes de la carrera de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales de nuestra Facultad de Ciencias Humanas».
«El profundo dolor que provoca la pérdida irreparable de seres queridos en circunstancias trágicas dejan vanas y sin sentido cualquier palabra que se intente decir al respecto. La comunidad de la Facultad de Ciencias Humanas se suma a este dolor y saluda con profundísimo respeto y pesar a familiares y amigos de los jóvenes fallecidos, en especial a los padres de Rúben Félix Ochea y Juan Ignacio Quiroga, alumnos de esta Facultad», expresa un comunicado emitido por la Facultad.
En el texto se agrega: «Porque privilegiamos la vida sobre todas la cosas, es que lamentamos con sincera congoja las pérdidas irreparables de jóvenes estudiantes empeñados en construir un futuro mejor para todos. Directivos y personal administrativo de la Facultad de Ciencias Humanas quedan a disposición de los familiares de Ochea y Quiroga para cualquier instancia que pueda ayudar a sobrellevar estas pérdidas».
Reprogramación
Con motivo del Asueto Académico Administrativo por le fallecimiento de los alumnos Rubén Ochea y Juan Quiroga, alumnos de la Facultad de Ciencias Humanas de la Universidad Nacional de Río Cuarto, la Secretaría Académica de esta Facultad informa que los exámenes correspondientes a este lunes 30 de Junio de 2008 serán tomados el lunes 21 de Julio de 2008 en los mismos horarios en los que estaban previstos inicialmente.
Cualquier información dirigirse a la Secretaría Administrativa de la Secretaría Académica de la Facultad o al teléfono 4676-463 en el horario de 08 a 10 de la mañana .