Cuando alguien adhiere a una idea, persiguiendo un ideal, es loable. Pero cuando una persona o empresa «sigue» a alguien buscando un beneficio social o económico, el futuro lo tiene contado. En el momento que ese respaldo se caiga, especialmente si es personal, arrastra a los demás consigo. Cuando un barco se hunde, todos tratan de ponerse a salvo. Algunos trataran de salvar algunas pertenencias y otros rapiñar lo que pueden en beneficio propio.
Aquello que sucedía a comienzos y mediados del siglo anterior en que
«Primeros los niños y las mujeres» no va mas. Ahora «sálvese el que pueda» y los mas fuertes sobrevivirán. El tiempo es tremendo y siempre hay cambios en todo. Así hemos visto que de miles de estatuas de Stalin como el gran benefactor, héroe y muchas cosas más, pasó a ser el más odiado. Cuando por allá en el 50 y algo, todo tenia el nombre de Perón, se paso a nada. Hoy cada día se va desdibujando más ese apellido y hasta se pide la extradición de su mujer para ser juzgada. Algo impensado hace unos años. A Fidel Castro también le sucederá lo mismo como a tantos.
Muchos periódicos se han plegado por la Ley de Supervivencia o beneficio. ¡Qué pena! También caerán como aquellos que los compran o tal vez alcancen a «borototizarse» a tiempo. Será lindo ver la evolución de muchos. ¡Cuidado! El barco comenzó a hacer agua, mejor el salvavidas a mano. El riesgo país, se eleva rápidamente.
Atentamente
Juan R Bell
92061605
Rio Cuarto